Arturo Roig se alzó con el título de 'Arrocero del futuro' en esta edición de Tastarròs, gracias a su receta de arroz con caza, setas de temporada y caracoles
Se trata del restaurante Community Kitchen fundado en Nueva York por el columnista gastronómico Mark Bittman
Caprichito es el tercer local de las hermanas Santoro, fundadoras de Ti Amo.Carnes estofadas, pastas y más platos tradicionales con sabor casero.
SANTIAGO DE CHILE.â?? "Nos queríamos comer Chile y eso hicimos, nos lo devoramos", confiesa Rodolfo Guzmán, creador de Boragó, el restaurante que llegó al segundo puesto en la lista de los Latin America's 50 Best Restaurants y en la actualidad ocupa el cuarto. Es uno de los cocineros más influyentes de la región y reconocidos en el mundo. Fue el primero en explorar todo Chile buscando productos nunca antes tenidos en cuenta. Su menú de 18 pasos recorre todas las regiones de Chile. "Nunca nadie había hecho lo que hicimos: para nosotros un ingrediente puede tener más de 300 posibilidades de uso", afirma Guzmán. Viajero, explorador, ex deportista y sobre todas las cosas, curioso. En 2006 abrió Boragó, un neologismo que creó y que hoy tiene lugar para 60 comensales y donde trabajan 30 personas en cocina, 15 en la sale, 10 en administración y 20 pasantes de todo el mundo que vienen a perfeccionarse en la "cocina endémica" de Guzmán."Hace 60 años atrás Chile era el país más pobre de la región", cuenta. Comer significaba para el chileno un evento social, pero "daba igual la calidad de la comida". Los mariscos y pescados se importaban, se miraba a Europa como un sitio aspiracional. "No conocíamos nuestro mar, ni sus productos", dice Guzmán. Luego de tener una experiencia exitosa en el esquí, estudió cocina y se fue a probar suerte a Estados Unidos y Europa, hasta que decidió regresar a su país con una misión: reescribir sus reglas culinarias. Hacer algo nuevo."Boragó vino a cambiar la historia, puse el foco en ingredientes endémicos, sabores locales y una conexión profunda con el territorio", dice Guzmán. Así fue que en 2006 abrió su restaurante, pequeño, donde solo cabían cuatro personas en la cocina. Sin embargo, comenzó a viajar y se contactó con más de 200 productores, antropólogos y biólogos para entender y descubrir productos que estaban perdidos y muchos olvidados. "Durante diez años tuvimos un ensayo profundo", dice. De 2006 a 2013 el restaurante no tenía reservas. "Estaba vacío: nadie nos conocía".En todo ese tiempo, nunca dejó de explorar y viajar por su país. "La curiosidad te permite tener hambre, nosotros teníamos hambre y queríamos morder fuerte", recuerda Guzmán. En un país, y una región poco acostumbrada a experimentar formas elevadas de aromas y texturas, las críticas hacia su trabajo fueron implacables. "Nos decían, las vacas comen pasto", sostiene Guzmán, en referencia a algunos platos de su menú que se presentan con plantas y raíces, con emulsiones. "Fue feísimo, pero esos años de fracaso nos permitieron prepararnos y aprender", agrega. Sin embargo, la economía no tiene corazón. Sin ver luz en el laberinto de las deudas, decidió poner en venta Boragó. "Este es el final", dice que se repetía en esos días. Corría el año 2013. Ese año iba a cambiar para siempre su vida. La lista de Latin America's 50 Best Restaurants hizo su desembarco en nuestra región y le dijeron que Boragó iba a estar muy bien posicionado. Referentes del mundo gastronómico le dijeron que debía ir a Perú para estar presente en la ceremonia. "Yo no tenía cómo pagar el alquiler de mi casa y estaba cubierto de deudas, no quería ir", comenta Guzmán. Fue su esposa quien le dio un ultimátum y lo obligó a ir. Fue y aquel año obtuvo el octavo puesto. El año siguiente, avanzó al cuarto y en el 2015 fue segundo. "De repente Boragó se llenó, y mi madre tuvo que esperar seis meses para poder sentarse a comer mi menú", recuerda Guzmán. La prensa nacional e internacional le hacía notas. Todos querían conocer al chef que había mapeado todo su país buscando aromas perdidos y reescribiendo la historia de su gastronomía. "Cuando veía mi foto en los diarios me costaba reconocerme", dice. El restaurante que estuvo por vender el mismo año que lo premiaron, fue el que le mostró al mundo por primera vez cómo era la era la gastronomía chilena. También los propios chilenos pudieron conocer sus aromas y sabores. "Antes nadie había hecho lo que hicimos, estábamos trabajando a ciegas por territorio inexplorado, y cuando Boragó se llenó de gente, ya sabíamos qué hacer, todos esos años de estar sin gente nos sirvieron para absorber todo el conocimiento", afirma Guzmán."Para movernos hacia adelante es necesario mirar para atrás", afirma Guzmán. En extremo original y movedizo, entendió que solo había una manera de hallar el gen de la gastronomía de su país: dejar de mirar a Europa y enfocarse en cómo recolectaban, qué comían y cómo cocinaban los pueblos originarios. "Para ver el futuro, nos fuimos 12.000 años atrás", sostiene Guzmán. "Lo que comían los araucanos se olvidó, nuestro trabajo fue traerlo al presente para pensar hacia adelante", cuenta.Su menú se nutre de toda esa exploración que hace más de 15 años comenzó a hacer y que en la actualidad aún está en marcha. "Probablemente no sabemos cómo va a terminar todo esto, toda esta acumulación de conocimiento", confiesa Guzmán. A la par del restaurante, creó el CIB, el primer centro de investigación para la cocina de Chile. Allí es el puente de mando de los cinco menús que sirve en el año: verano, otoño, invierno, pre primavera y primavera. En vidrios y paredes se ven anotaciones, fórmulas, cifras, ensayos de prueba y error, palabras tachadas, porcentajes, números. Con rigurosidad científica, los cocineros experimentan, el propio Guzmán recorre este laboratorio como un niño en una juguetería y muestra sus experimentos, como un limón azul deshidratado desde 2022. "Ha cambiado totalmente su aroma y ahora lo usamos rallado y creamos nuevos sabores", dice.Cientos de frascos muestran fermentaciones, líquidos y productos. Todo está etiquetado, brilla y la limpieza es casi anormal. "Es un diccionario de los aromas de Chile", sostiene. "Chile sin serlo, funciona como una isla", dice Guzmán. Su manera de contar las historias se hace a través de sus menús y de un método que llamó "endémico" Trabaja con los ciclos de la naturaleza. "Boragó no solo sirve comida, sino cuenta historias: todos los productores que nos abastecen son tan protagonistas como los que cocinamos", subraya Guzmán. Inquieto y con una mirada entrometida, es difícil verlo quieto un minuto, camina por las mesas explicando el sentido de cada plato, la historia detrás de cada producto. Nacido en 1978, en una familia de clase media, nunca tuvo las cosas fáciles y siempre supo que tenía que hacerse su propio camino, construyó su destino. "Me sirvió mucho haber sido deportista, me caía pero sabía cómo levantarme de nuevo". Golpeó puertas y mandó cartas y faxes en tiempos en donde las redes no existían. Tenía un único objetivo: aprender. "La comida tiene que mover todos los sentidos", sentencia. Sus platos son una puesta en escena, un guion real que transporta al comensal, propone un viaje, en cada paso a una región diferente del extenso territorio chileno, incluyendo Rapanui, la remota isla de Pascua. "Es mucho más que un cocinero, Rodolfo tiene algo de científico", resume Rafael Tonon, periodista portugués especializado en gastronomía. Los 18 pasos de su menú de pre-primavera podrían estar expuestos en un laboratorio, pero también en una galería de arte. Son un tributo a su investigación y un homenaje a la tierra que lo vio nacer. "La comida es el puente más claro entre la naturaleza y el hombre, por lo tanto, es parte de nosotros", argumente Guzmán.Y sigue: "Por eso es cultura. Mientras más entendemos todos los tipos de vida en este mundo, mejor nos entendemos a nosotros mismos", agrega Guzmán. Para él, un hongo, una raíz, la hoja de una planta son mucho más que eso, son aromas, pero también entidades vivas. "Cuando tocas un árbol, está vivo, igual que tú". Boragó tiene su primer turno a las 17.30 y el menú completo tiene un costo de 198 dólares. Está ubicado en el barrio de Vitacura y desde su salón se puede ver el cerro Manquehue, el más alto de Santiago. "Vamos a buscar plantas que solo crecen pocos días al año", afirma Guzmán, mirando la montaña. Esas plantas pasan desapercibidas para el habitante de la ciudad, pero en el menú son protagonistas estelares. "Lo que tenemos alrededor es increíble", dice, apasionado. Para el chef, la naturaleza es una despensa."Visitar Boragó es viajar a un lugar desconocido de nuestro territorio ya que siempre me encuentro con algún producto que no conozco de Chile", cuenta Max Raide, empresario gastronómico que está a cargo del consagrado Casa Las Cujas y es creador de la "Ruta Trasandina", una idea con un fin noble y necesario: unir los países latinoamericanos a través de sus cocinas. Es un actor fundamental en el crecimiento de la gastronomía chilena. "La cordillera uno une, no nos separa", acostumbra a decir como un mantra. "Rodolfo le ha mostrado al mundo no solo los mejores productos de nuestra tierra, sino que además ha logrado que la gente viaje a conocer Chile para probarlos", afirma Raide. También, como consecuencia directa, Guzmán ha producido un efecto de cascada: "Abrió las puertas para que otros restaurantes como Casa las Cujas, Demo Magnolia, Karai, Ambrosia, entre otros, pudieran mostrar sus productos y platos desde la costa chilena hasta la Patagonia", confirma Raide.Mientras todos los cocineros de la región están esperando los resultados de los Latin America's 50 Best Restaurants que se darán a conocer en diciembre en Guatemala. Guzmán están absorto en sus viajes, investigaciones y el menú de verano. "Tenemos que estar una estación adelantados", dice. En su CIB expone un rollo de papel donde muestra ilustraciones y anotaciones a mano: primera debe dibujar un plato en el papel para luego llevarlo a la mesa, a la realidad.La Argentina es un país que no le es indiferente. Su padre lo llevaba cuando era niño. "Era como visitar París", recuerda. El lazo con sus colegas es directo y de hermandad. Conoce la escena foodie porteña. Nombra a Aramburu, Trescha, Niño Gordo, Grand Dabbang, Don Julio y en un encuentro de la Ruta Trasandina de este año probó la pestaña de ojo de bife de El Mercado Faena. "Buenos Aires es una de las capitales más vibrantes de la región, tiene una oferta gastronómica impresionante", asegura Guzmán.Dos cosas lo tienen muy entusiasmado. Un pisco que está ensayando hecho con flores del desierto de Atacama y un chocolate sin cacao, de espino chileno, un árbol. Lo que parece imposible, en "Boragó", se hace posible. El descubrimiento es una acción que se produce a diario. "Cuando el hombre descubrió el fuego, creció nuestro cerebro, nos volvimos más inteligentes", afirma Guzmán. Ser uno de los mejores cocineros del mundo no lo conmueve. Fue algo orgánico que sucediera. "Cuando tu haces algo difícil y lo arriesgas todo, y lo haces con estilo, eso es arte", así resume Guzmán su trabajo.
La abundancia de metros cúbicos y la integración de tres módulos fueron un gran desafío. Pero también, la fidelidad a ciertos valores que identifican un modo de hacer, ya sea construir o cocinar. Hablamos de la monumental reforma de una esquina que alojaba el taller mecánico-playa de carga de una fábrica de soda y dos locales; hoy es en un restaurante de gastronomía contemporánea que desde hace un año marca el pulso de las tendencias: Ness. La obra del restaurante ubicado en Núñez fue llevada adelante por los arquitectos Esteban Rodríquez y Manuel Nesta, y Santiago Vaca Narvaja, socios de Oficios Estudio Asociados, un estudio que ejecuta gran parte de la herrería y el mobiliario en su propio taller. "La clave era evitar la obviedad. Porque la primera idea que surge es la que tiene todo el mundo. Recién en la cuarta idea, cuando la decantaste un poco, se empieza a mostrar algo más o menos distinto", explica Rodriguez.Arquitectura que suma experienciaEntrar al restaurante, degustar opciones de su menú y habitar ese espacio da la oportunidad de entender cómo la arquitectura puede no solo contener, sino potenciar una visión culinaria como esta propuesta de autor que lleva el sello de Leo Lanussol (ex Proper) en la cocina y de Esteban Cigliutti (ex Ya Cabrón) en el negocio. "Apenas vi el espacio con esos techos altísimos, supe que era acá. Me pareció muy distinto a todo, espectacular", recuerda Cigliutti.La reforma privilegió la funcionalidad extrema y la diferenciación material para que la alta cocina a leña se convirtiera en una experiencia escenográfica e integrada.El trayecto de una reformaDurante un año entero, el equipo de Estudio Oficios Asociados se ocupó de potenciar los disparadores que se les planteaban y de resolver interrogantes estructurales complejos. La esquina de Grecia y Jaramillo, con entrada por ambas calles, originalmente estaba segmentada en tres con distintas lógicas: un inmenso playón para camiones y dos locales. La estrategia arquitectónica se basó en la conservación de la esencia fabril. Se decidió mantener la fachada original del edificio, el techo de chapa -a 10 metros de altura- y la estructura base. Para lograr la integración volumétrica del restaurante, fue necesaria una demolición controlada de paredes que eran portantes. Todo el hierro que se observa actualmente fue incorporado para sostener los muros superiores y la carga del techo, reestructurando el soporte que antes descargaba en el piso. Este requerimiento técnico fue monumental por la escala del local gastronómico: 397 metros cuadrados. El amplio espacio vertical suponía un desafío que fue asumido mediante la construcción de un puente y la ubicación estratégica y estética de los ductos de telas. Fachada retraída + bar de vinosPara que la dinámica en el espacio funcionara bien, se tuvo que tener en cuenta no solamente el interior sino el exterior: contemplar un lugar de espera, y también a dónde saldría la gente a fumar.Como se quería preservar el frente original, la solución fue desplazar la línea de la fachada hacia adentro. Esto generó una "vereda interna", con un banco de diseño, ceniceros y un espacio a resguardo que parece desafiar la lógica imperante de los restaurantes que tienden a avanzar hacia el cordón. Nos basamos en los errores que yo había cometido en Proper para no cometerlos acá. La gente no tenía dónde esperar. Hoy tenemos una vereda interna y hay un bar donde podés picar algo o tomar una copa de vino hasta pasar al salón.Leo Lanussol, chef de NezLa nueva carpintería que da vida a esta segunda fachada se diseñó en perfilería metálica tipo T, una sucesión de módulos que alberga cerramientos de policarbonato y vidrio. Aunque el material es hierro, la segmentación permite que el elemento sea más delgado y se perciba liviano, ganando translucencia. La carpintería funciona como un articulador del espacio interior, enriqueciendo la fachada original al dejarla "limpia" de su concepción primitiva. El piso de cemento alisado proporcionó un elemento unificador para todos los ambientes que se integraron. Sobre el bar de vinos hay una planta superior donde funcionan las cámaras y una cocina de pre producción equipada con tecnología de punta.Echar raícesLa pieza central del diseño, que aporta calidez a la dureza fabril, es el árbol en el salón. Un olivo, que eligió Leo por su contundente connotación que se asocia con alimento, con historia y ¡con Mendoza! Si bien se había pensado ubicarlo en un rincón, luego se decidió rodearlo con mesas, creando un paisaje interno que podría recordar a la cadena alemana de restaurantes Vapiano, que pone un olivo central en cada una de sus sucursales alrededor del mundo.Para su cuidado, se realizó una intervención mayor: abrir parte del techo para crear una lucarna cuadrada, permitiendo la entrada de luz natural vital. Adicionalmente, se adaptaron ventanas en la carpintería que se abren semanalmente para ventilación. Se priorizó al olivo incluso sobre la técnica, modificando la ruta del ducto de extracción (que era 1.5 metros más largo) para evitar interrumpirlo. Se diseñó e instaló un sistema de riego y electricidad especializado para el árbol. La iluminación se trató como un elemento escenográfico fundamental, por eso contrataron a un diseñador especializado en puestas en escena. El resultado es un sistema complejo, totalmente regulable, que puede controlarse mediante el celular; crea un ambiente teatral al espacio y permite la optimización del uso de la energía.Este concepto también aparece en otro rincón -inesperado- del lugar: detrás de los fuegos, las parrillas y el horno de barro dejan lugar a una bacha escondida donde también hay una garumera que aprovecha el calor de las brasas para fermentar preparados. Es que en Ness, los aliños, los encurtidos y las bases que se usan en las cocciones, también son de elaboración propia.La materialidad como lenguajeLa búsqueda de lo "distinto" se tradujo en una experimentación constante con los materiales, muchas veces privilegiando el ingenio por sobre el costo.Revestimientos de ladrillo. Para dar textura a las paredes, se utilizaron ladrillos comunes cortados por la mitad. De cada ladrillo hueco se sacaban dos tapas, desechando la parte central. Esta técnica proporcionó un revestimiento original y estético, además de ser una solución de bajo costo. Estos ladrillos tienen las aristas redondeadas dibujando una divisoria en forma envolvente que delimita el sector de los baños. Mármol invertido. En la cocina de producción de la planta alta se necesitaba una mesada. El equipo eligió el mármol más económico disponible en stock. Para diferenciarlo, se instaló al revés, usando el lado opaco y sin brillo, lo que resultó ser un acierto ya que le dio un aspecto singular. Azulejos y maderas. Los azulejos seleccionados para la cocina a la vista de color terroso eran los únicos en stock, aunque deseaban que fueran azules. Sin embargo, este excedente de la oferta les indicaba cierta exclusividad: al ser un color "marginal" no sería replicado en otros lugares. Respecto a las maderas, se eligió una semidura con una beta muy suave, buscando que no compitiera visualmente y se integrara a la estética de grises cálidos y negros del lugar. Cortinas con velas de barcos. La sutileza en la separación de espacios, dentro de un gigante espacio común, se logró con cortinas hechas en telas de velas de barco. Recicladas de veleros, esta decisión se alineó con el concepto de aprovechamiento, sustentabilidad y cero desperdicio. Los barrales apelan a la simpleza máxima: fueron adaptados de los que se usan en las ventanillas de los ómnibus. Ductos de tela inflada. La climatización de este espacio de gran volumen y alta exposición al fuego supuso un desafío. Se optó por ductos de ventilación hechos de tela, un sistema que Lanussol ya había usado antes. Estos ductos, importados de República Checa y comercializados por una empresa mendocina, son estéticos y sobre todo funcionales: son una alternativa muy higiénica ya que pueden desmontarse fácilmente mediante cierres para limpiarlos semanalmente con hidrolavadora, evitando la acumulación de grasa. El compromiso con el detalle se extendió incluso al equipamiento no estructural. Lanussol eligió cubiertos japoneses y los uniformes fueron confeccionados por la marca de indumentaria Revolver. Sinergia: la claveEstá a la vista, Ness denota simpleza en la estética y originalidad en las elecciones, así como funcionalidad en pos de garantizar la higiene y la cómoda fluidez de movimientos, el foco en la sustentabilidad y el desperdicio cero, la calidad de los productos y de su trazabilidad y la elaboración propia de cada elemento usado.La clave está en haber logrado conjugar estos aspectos que definen tanto la reforma arquitectónica y el interiorismo como la propuesta culinaria.Ness: Grecia 3691, Núñez, CABA. Abierto de martes a sábados desde 18 y mediodías a partir de las 12.
A mediados de año, abrió en Palermo un nuevo "bodegón italoamericano" â??como lo definen sus dueñosâ?? que en la búsqueda de un plato disruptivo que fusionara estas dos cocinas crearon la hamburguesa de sorrentino, un plato original y polémico que se convirtió en uno de los más pedidos en el salón. Nació cuando se decidió sacar de carta de Gianni's (Godoy Cruz 1729) la hamburguesa clásica por problemas operativos â??era muy gruesa, demoraba la cocción y volvía a cocinaâ?? y los dueños, junto al chef, buscaron una alternativa que mantuviera el espíritu porteño-italiano, pero con un toque provocativo y disruptivo. La elección fue directa: tomar el sorrentino â??creación argentina hija de tradición italianaâ?? y convertirlo en el corazón del sándwich.Un restaurante de Palermo sorprende con la hamburguesa más original (o menos pensada)El desarrollo no fue caprichoso: se probaron recetas y ajustes durante 30 a 45 días hasta fijar cocción, armado y topping, y el equipo cerró la que definen como la versión "más rica, mejor y polémica". El resultado es una hamburguesa de 450 gramos compuesto de dos sorrentinos fritos rellenos de un blend estilo cheesburger. La recepción del público terminó de validar la apuesta y hoy este se cuenta entre los platos más vendidos del restaurante.â?? ¿Son gastronómicos o vienen de otros rubros?â?? Ariel Cantor: Toda mi vida fue corporativa. Después de la pandemia dejé de trabajar en un importante banco privado. Luego, fui director comercial de la aplicación Morfy hasta enero de este año. Mi palo son las redes sociales, el marketing y todo lo que tiene que ver con lo comercial. â?? Mariano Piñeiro: Vengo de familia gastronómica, mi abuelo tuvo una panadería. Estudié producción de televisión y eventos, pero me involucré en la gastronomía hace 25 años. Mi rol es 100% operativo.â?? ¿A quién se le ocurrió crear esta hamburguesa original y polémica? â?? Ariel Cantor: La idea de la hamburguesa de sorrentino surgió conversando con Lucas, el chef, y con Sebastián, otro de los socios. Queríamos crear un plato que tenga un poco de los dos mundos: la hamburguesa, relacionada con lo estadounidense, y el sorrentino, una pasta rellena, relacionado con lo italiano. Ariel nos dio un par de alternativas y la que quedó mejor, más rica, más polémica, fue la hamburguesa de sorrentino. â?? ¿Estamos de acuerdo en que el sorrentino es un invento argentino, de Mar del Plata? â?? A: Estamos de acuerdo en que el sorrentino es un invento argentino, marplatense, pero la pasta rellena es italiana. Y Sebastián es de Mar del Plata. â?? ¿Cómo fue el proceso para materializar la hamburguesa de sorrentino? â?? Mariano Piñeiro: Teníamos una hamburguesa clásica, de un blend de carnes, apenas smasheada y quedaba muy gruesa. Tardaba en cocinarse bien. Llegaba a la mesa y generalmente la devolvían, porque a algunos les gustaba más cocida. Nos trababa la cocina, esa es la realidad. En un momento dijimos: "Bueno, hay que sacarla de carta". Y ahí entró en juego nuestro chef Lucas, que nos trajo unas cuantas propuestas. Entre todos elegimos la de sorrentino. Hicimos unas cuantas pruebas de sabores. â?? ¿Cuántas versiones probaron antes de lanzarla? â?? M: Probamos entre 30 y 45 versiones.â?? ¿Qué lleva? ¿Cómo hacen el relleno? â?? M: Se hace un blend de carne con queso cheddar, estilo cheeseburger, y se lo rellena como un sorrentino de jamón y queso. Luego se fríe. El pan es un pan de hamburguesa simple. Despuésâ?? ¿Es un solo sorrentino entre los panes? â?? A: Dos sorrentinos. â?? ¿Viene con algún topping de base? â?? A: Salsa bacon dulce, como una mermelada. Y sale con papas fritas rústicas condimentadas con romero y pimentón.â?? ¿De cuánto es el gramaje de cada sorrentino? â?? A: En total son 360 gramos de relleno. Con el pan y todo suma casi 450 gramos.Un restaurante de Palermo sorprende con la hamburguesa más original (o menos pensada)â?? ¿Cómo la recibió el público? â?? A: Hubo haters que se indignaron, pero los invitamos a que lo prueben. Vos podés lanzar un bombazo como fue esto de la hamburguesa de sorrentinos, pero si no perdura en el tiempo no sirve. La lanzamos a mediados de agosto y, por suerte, perdura en el tiempo. No llegamos a 4 meses, tenemos más de 1500 calificaciones positivas en Google con 4,8 de estrellas. â?? ¿Y los comensales vuelven a pedirla? â?? A: Sí. Es uno de los productos más vendidos. El producto más vendido son los ñoquis Cacho Pepe en la horma de queso. Después le sigue la Lasaña Frita y los Espaguetis con albóndigas de cordero. La hamburguesa debe estar te diría en el número 10 de los platos que tenemos.â?? ¿Con qué se marida la hamburguesa de sorrentino? â?? A: La gran mayoría de gente lo pide con gaseosa. A mí me gusta el vino tinto. â?? ¿Y después a la hora del postre, qué tienen? â?? A: El furor es el tiramisú de pistacho. Es para compartir y es el postre más pedido. También tenemos el dolce banana. Y sacamos un nuevo producto: un raviol de chocolate relleno de mousse y ganache de chocolate acompañado con helado de crema americana.â?? Arriesgado. ¿Es hervido? â?? A: Sí, se hierve y se sirve como un volcán de chocolate.â?? ¿Cuál es la edad promedio de su clientela?â?? A: Desde chicos de 20 años que nos siguen en las redes hasta gente grande que festeja su cumpleaños. Hemos tenido cumpleaños de personas de 85 años. â?? ¿Hacen delivery?â?? M: Todavía no lanzamos el delivery en las apps famosas porque todavía no estamos 100% seguros de cómo va a llegar el producto, sobre todo hablando de la hamburguesa. La hemos llevado a casa nosotros y no nos termina de convencer en un 100%, está en un 90%.
Luego de recorrer el litoral veracruzano tras las inundaciones del río Tuxpan, la estructura fue asegurada en Alvarado para evitar riesgos en la navegación
El cierre del estrella Michelin y su posterior cambio de concepto se incluyen entre los planes de renovación del hotel Monument para la celebración de su décimo aniversario
Esta propuesta especial invita a los amantes de la alta cocina a descubrir nuevas sensaciones dulces y saladas en la capital colombiana
Detectar restaurantes de calidad dudosa no es tarea sencilla, pero existen señales que pueden orientar a los comensales más exigentes hacia la auténtica cocina casera
Este restaurante, ubicado en una tranquila plaza peatonal de Ciutat Vella, triunfa con su terraza y con una carta con especialidades como la pizza arrabiata, las focaccias o el risotto
Los solteros han vivido un momento tenso al hablar de sexo durante la cena
El día a día de un cocinero profesional está marcado por el tic tac de los temporizadores, los fogones con altas llamas naranjas y la impronta personal en cada platillo. Para el argentino Ariel Amoroso, actual sous-chef del restaurante Amal Miami, esa impronta nace del aprendizaje junto a sus abuelos en San Isidro y de la búsqueda constante de nuevos sabores.Sus inicios en la cocina y cómo fue su llegada a EE.UU.Ariel nació en San Isidro, Buenos Aires, y desde pequeño estuvo rodeado de sabores y aromas familiares. Su abuela le enseñó el ABC de la cocina casera, mientras que su abuelo le transmitió la pasión por la gastronomía al fuego, una tradición que marcaría sus primeros pasos como cocinero."Mi abuela fue un soporte en cuanto a la enseñanza de la cocina casera. Muchos platos de los que yo preparo hoy en Miami son un reflejo de ella. Mi abuelo, en cambio, ligado al campo en la Argentina, fue quien me transmitió todo lo relacionado con el fuego: carnes a las brasas, a la chapa, esa cultura tan nuestra, tan argentina", recordó el chef en una entrevista con LA NACION.Esas bases fueron el impulso que lo llevó a dedicarse de lleno a la cocina. Tras finalizar la escuela secundaria, se matriculó en el Instituto Argentino de Gastronomía (IAG) y consiguió sus primeros trabajos en restaurantes. Con el tiempo, al incorporar los conocimientos detrás de cada plato, fundó tres emprendimientos gastronómicos, entre ellos Vida Sana, un restaurante en Ramos Mejía reconocido por su propuesta sin agregados químicos ni conservantes, con platos como la lasaña de vegetales sin masa y la pizza siciliana de harina integral.Pese al éxito alcanzado, Amoroso se enfrentó a reiterados robos en su restaurante. Esa situación lo llevó a cerrarlo y emigrar a EE.UU., en busca de un entorno más seguro para continuar con sus proyectos."Fue una época muy complicada", reconoció el chef sobre aquellos años. "Cuando tuve mi restaurante en Ramos Mejía era muy difícil ir de zona norte a zona oeste, y no podía estar tranquilo. Viví muchas situaciones de inseguridad", agregó.Su contacto con la gastronomía en Miami y sus diferencias con la ArgentinaAmoroso llegó a Miami, Florida, en 2014, acompañado por el apoyo de su madre y su hermana, que ya residían en la ciudad. Esa contención fue clave para que pudiera insertarse en la industria gastronómica, donde dio sus primeros pasos en un restaurante argentino.Después de ese primer trabajo en EE.UU., incursionó en otros restaurantes de prestigio, como la Mansión Versace y un establecimiento en el complejo privado Santa María. Estos lugares fueron su base para conocer el estilo gastronómico de Miami, caracterizado por su diversidad en los sabores y texturas. "Acá en Miami aprendí sobre esa diversidad de sabores y la experiencia de combinar productos que antes no tenía tan claros en mi cabeza", analizó el chef. "Por ejemplo, el uso cotidiano del arroz, que no es tan común en la Argentina, mezclado con frijoles y acompañado de plátano maduro, es una mezcla que realmente despierta los sentidos", continuó.Amoroso sostiene que, a diferencia de Buenos Aires -que suele enfocarse en una gastronomía de raíz española e italiana-, Miami ofrece una amplia variedad de experiencias culinarias gracias a su carácter cosmopolita, lo que favorece una mayor globalización de productos.La impronta de Ariel Amoroso como chef en FloridaAriel Amoroso tuvo la oportunidad de trabajar en al menos cinco restaurantes en Miami. Asegura que logró aprovechar las oportunidades culinarias en la ciudad, y que su esencia argentina lo ayudó a marcar la diferencia en su cocina.Cansado de los robos, se fue a Miami y ahora se consolida como un chef de renombre: "Quién no sueña, no logra""Tuve un chef referente cuando era joven que me dijo lo siguiente: 'Cuando no aprendas nada más en un restaurante, cambia a otro'. Eso fue lo que hice durante mi carrera: ir a trabajar a distintos lugares y aprender todo lo posible. Esa experiencia me dio la versatilidad para hacer de todo", reflexionó el chef. "Al mismo tiempo, nosotros tenemos una identidad, como un ADN propio. A mí siempre me arrastra mi toque argentino; por más que quiera hacer otra cosa, tengo mi marca y está en todos los platos que yo hago", agregó."Fue duro": la experiencia de Ariel Amoroso como migrante en EE.UU. El chef ya cumplió diez años en EE.UU., una etapa marcada por éxitos y aprendizajes. Aunque contó con el apoyo de su familia desde el inicio, la adaptación a la cultura estadounidense fue uno de los desafíos más grandes al llegar al país norteamericano. "Mi experiencia fue más fácil que la de otros migrantes en general, por tener a mi familia en Miami. Sin embargo, fue duro en lo cultural", dijo.Entre los beneficios destacados por Ariel de Miami se encuentra el manejo del español. En efecto, remarcó que el inglés fue uno de sus grandes limitantes, dado que no dominaba el idioma al llegar a EE.UU."Creo que Miami, para el latino, es mucho más fácil por el tema del lenguaje. La mayoría habla español y hasta hay carteles en la vía pública en el mismo idioma. Sin embargo, uno se va un poquito más para el norte y ya todo es en inglés. Entonces, creo que el idioma fue mi primer limitante, porque cuando vine acá, no lo dominaba", detalló. Pese a estas dificultades, el chef sostiene que el español le ayudó a adaptarse un poco más rápido a las diversas culturas que ofrece Miami, en su mayoría latinas.El próximo plato de Ariel Amoroso y su "sueño americano"Ariel Amoroso es el actual sous-chef (subjefe de cocina) del restaurante Amal Miami ubicado en 3480 Main Highway, Miami, Florida. Sin embargo, desde hace meses está coordinando la apertura de su propio local en Miami Beach llamado Nonna, en honor a su abuela. Se prevé que su lanzamiento sea a principios del año que viene. "Siempre he estado a cargo de cocinas y ahora estoy con un emprendimiento en un hotel de Miami Beach, en el cual voy a abrir por primera vez un restaurante mío en EE.UU.", anunció con emoción durante la entrevista.Con la mirada puesta en su nuevo desafío culinario, Ariel señaló que su historia no corresponde al tipo "sueño americano" estadounidense, sino que representa un logro personal en el que pudo reconstruir lo que dejó atrás en la Argentina."La realidad es que no vine en busca del sueño americano. Pero sí que logré todo como chef, que era tener mi lugar, que la gente apueste por mí", remarcó. "Es un logro personal y creo que mi vida se basa en eso. Siempre digo lo mismo: quien no sueña, no logra", cerró.
Este fin de semana termina la fiesta nacional de la flor con un evento para disfrutar con toda la familia, además un lugar lleno de jueguitos, por último, dónde comer platos como los que hacían las abuelas. Desfile de carruajesEn el partido de Escobar se está llevando a cabo la 62ª edición de la Fiesta Nacional de la Flor. Este año la flor elegida ha sido el girasol como símbolo del sol que representa la felicidad, vitalidad, positivismo, energía, amor y admiración.El predio está colmado de las mejores flores que exponen los viveros dentro de los pabellones, se pueden encontrar especies únicas, hay un mercado de flores, talleres, exposiciones, food truck y un parque inflable económico para los chicos. El gran evento de floricultura terminará este fin de semana con varios eventos de cierre que serán un atractivo para toda la familia. El viernes 10 a las 20.30 horas será el recital de Turf, para acceder al show se pedirá a cambio cuatro alimentos no perecederos que luego se destinarán a comedores y merenderos del programa municipal Escobar Hambre Cero. El sábado 11 a las 19 horas será el tradicional desfile de carrozas donde vecinos de Escobar, instituciones educativas y productores locales exhiben sus creaciones decoradas con flores, arte y elementos artísticos. El espectáculo es un evento que podrá disfrutar toda la familia y se realizará por la avenida Tapia de Cruz finalizando en el predio de la calle Gelves con la presentación de Supermerk2, Nicolás Mattioli, Dany Lescano y Jambao. El domingo se elegirán a los y las embajadoras que representarán a Escobar durante todo el año en distintas celebraciones además de recibir un premio económico. Los postulantes se pueden conocer por medio de la cuenta de Instagram. La entrada a la exposición tiene un precio de $10.000, menores de 10 años entran gratis. Dónde: Mateo Gelves, 1051, Predio Floral, EscobarMás información: www.escobar.gob.ar/fnf/Mundo gamer por horaTodos fuimos de chico a jugar a los "fichines" en la costa, ahora es posible ir con nuestros hijos o sobrinos en Buenos Aires y en lugar de comprar fichas se abona una entrada que da la posibilidad de jugar a lo que se desee durante una hora. Inspirado en los cyber pero para video juegos, se creó este espacio donde los niños a partir de los cuatro años y adultos pueden pagar por jugar durante una hora. Hay juegos de arcade sencillos para los más chiquitos, realidad virtual, Playstation, Nintendo, Nintendo Switch, entre otros. Se pueden encontrar juegos como el Pacman, Tetris y Mario Bros, hasta Fifa, Fortnite, Minecraft y Just Dance. "Buscamos diversión para toda la familia, para grandes y chicos, para todos los gustos con un abanico total de video juegos", asegura Luis Fuentes dueño de Cyberplay. Dónde: Cyberplay. Guatemala 4425, Palermo. Av. Entre Ríos 1420, San Cristóbal. Juan Domingo Perón 2240, Valentín Alsina. Más información: @cyberplay.ar La comida de la abuela con juegosEn Villa Luro se encuentra un restaurante café pensado desde el menú hasta el lugar para compartir en familia. Es que las recetas son los mejores platos de la abuela: lasagna, milanesas, carne al horno, pastel de papas y ñoquis, por nombrar solo algunos. El menú kids incluye bebida y se puede elegir entre pizza, pastas, hamburguesas y nuggets. Para quienes deseen un brunch o ir a tomar el té los niños tienen su propio menú con cajita feliz con juguete, panqueques y milkshake. Dentro del restaurante un sitio destinado al juego con disfraces, animadoras y un pelotero con desafíos para que los chicos se diviertan mientras los grandes continúan disfrutando de la comida casera de la abuela. Dónde: Aida restaurante. Pola 299, Villa LuroMás información: @aida_restaurante
El Atracadero, conocido restaurante de mariscos, quedó a la deriva tras el desbordamiento del río, mostrando la fuerza de las lluvia
Él y su familia estaban de viaje para festejar su cumpleaños
El magistrado Álvaro Restrepo Valencia fue víctima de un ataque armado en un establecimiento llamado Mi Pueblo
Zohran Mamdani guarda recuerdos de su infancia en el restaurante Zabar's de Nueva York. El candidato demócrata por la alcaldía de la ciudad resaltó su plato favorito en el negocio del Upper West Side y lamentó la muerte de su principal propietario, Saul Zabar. ¿Dónde se ubica y cuánto cuesta comer en el lugar?Dónde queda Zabar's, el restaurante que marcó la infancia de Mamdani"Crecí yendo a Zabar's", expresó Mamdani en una publicación de X el 7 de octubre. El candidato a la alcaldía de la ciudad, que se posiciona como favorito en las últimas encuestas, reveló su receta favorita del lugar: "Muchos de mis recuerdos de infancia giran en torno al mejor salmón ahumado de Nueva York", expresó.El popular restaurante se ubica en el 2245 de Broadway, en el barrio del Upper West Side de la ciudad de Nueva York. Sus puertas abren todos los días de la semana, de lunes a sábados de 8 a 19.30 hs (hora local) y los domingos de 9 hs a 18 hs. Además del negocio principal, cuenta con una tienda de artículos para el hogar y un café.Cuánto cuesta comer en Zabar's: el precio del plato favorito de MamdaniEl restaurante ofrece diversas opciones gastronómicas, que van desde desayunos hasta almuerzos y cenas para llevar. Entre las más populares, se encuentran el pescado ahumado, bagels y panadería, queso y fiambres. Algunos de sus valores son:Salmón ahumado: el plato destacado por Mamdani, presenta un precio que ronda entre 32 y 64 dólares. Su versión en escabeche cuesta US$22,49.Pescado blanco: entre US$75 y US$120.Ensalada supernova picada: US$15,98.Pan de centeno: US$6,98.Bagels tostados: definidos como originales de Nueva York, un paquete de seis unidades presenta un valor de US$10,98.Además, el establecimiento también cuenta con opciones kosher especiales, como babka, rugelach o cheesecake.El mensaje de Mamdani por la muerte del dueño de Zabar's en Nueva YorkEl propietario de Zabar's durante más de siete años, Saul Zabar, falleció este 7 de octubre. "Hoy, el Upper West Side ha perdido a una leyenda que convirtió la humilde tienda de sus padres en una institución culinaria", expresó Mamdani en la red social.El empresario murió a los 97 años y la firma que lleva su apellido le dedicó un sentido mensaje en Instagram. "El fallecimiento de Saul marca el fin de una era, pero su legado vive en cada rosquilla, cada trozo de pescado ahumado, cada taza de café y cada conversación que llena nuestra tienda cada día", escribieron.Asimismo, remarcaron los valores que perduran en el negocio desde su apertura en un local de menos de siete metros de ancho en el 80 West Street, en 1934, bajo Louis y Lillian Zabar. "Los principios y prácticas de nuestro fundador y padre siguen guiándonos: respetar al cliente", puntualizaron."Nunca, jamás, escatimar en calidad. Ofrecer un precio justo. Y, por último, pero no menos importante, seguir buscando lo nuevo y lo maravilloso".
Un patio cerrado con paredes cubiertas por una madreselva trepadora que llega hasta la terraza. Palmeras, buganvilias y otras plantas que convierten al espacio en una suerte de jardín escondido en la parte trasera de la casa. Desde las mesas, se ven los marcos de las puertas-ventanas francesas que dan al exterior de la propiedad. Se divisa también un salón ovalado. El idílico ambiente corresponde al café y restaurante Muyè. Funciona en una casa de 1913 que perteneció a Tomás Vallée Meyer Pellegrini, sobrino nieto de Carlos Pellegrini, presidente de la Nación de 1890 a 1892. Fue construida por encargo de los abuelos de Tomás, Julia Delfina Pellegrini Bevans y Martín Warburg, bajo el diseño del arquitecto Carlos Nordmann."Conozco la casa desde hace muchos años porque con una ONG ocupábamos la planta baja como oficina. Tuve el gusto de conocer a Tomás, que falleció a los 102 años. Él no quería alquilar la casa ni hacer ningún emprendimiento. Luego, Sergio Etchart heredó la casa y llegamos a un acuerdo para reformarla y adaptarla para este proyecto gastronómico", cuenta Fernando Bertuol, uno de los propietarios del local, que inauguró en junio de este año. Uno de sus socios es Marcelo Boer, con larga trayectoria en la gastronomía y en el Grupo Acurio, del célebre chef peruano Gastón Acurio.El restaurante, en la planta baja, conserva la estructura original de la casa, así como las molduras, los pisos, las puertas y las ventanas. "Los pisos son alemanes y originales. Cambiamos la parte interna del restaurante, como la cocina, los depósitos y la zona de producción. Lo mismo con las cañerías, plomerías y electricidad. Se renovó todo por completo. El patio interno lo conservamos tal como estaba: sólo pintamos las paredes, canteros y macetas. Al entrar por la puerta desde la calle, nadie imagina que encontrará un jardín interior repleto de plantas", agregó Bertuol sobre la casa, en la que también funciona un club de bridge en el primer piso.Muyè está abierto todos los días de 12 a 23.30, con una variedad de platos como bife de chorizo, ñoquis trufados, tortiglioni con crema de hongos y un toque brasileño -Bertuol nació en Santa Catarina- con una moqueca de camarão. En las entradas, se destacan las gírgolas a la plancha, que vienen con puré de coliflor, escabeche de hongos y huevo poché. En la lista de postres, la gran estrella es la Torta Estilo Vasca, con una composta de frutas de estación y crema inglesa.Dentro de los platos "all day", se destacan los huevos turcos, el avocado toast, la trucha patagónica curada y la french toast con higos negros, crema de mascarpone y miel de romero. También hay una selección de sándwiches y repostería, como un brownie con escamas de sal marina, alfajor de almendras y budín de limón.A primera vista de la carta, llaman la atención sus precios accesibles. Bertuol dice que quieren estar en sintonía con la situación del país desde la apertura. "Queremos que la gente nos conozca por ofrecer productos frescos y estar justos con la línea de precios", dice sobre el restaurante, que tiene 70 cubiertos.Aunque lleva pocos meses, Bertuol dice que el restaurante se ganó un lugar entre los vecinos de Recoleta. "Mucha gente ya conocía la casa y a la familia de Tomás (Vallée Meyer Pellegrini). Apuntamos a ser un lugar de referencia para el barrio y, con el tiempo, transformarnos en un restaurante tradicional. Es difícil emprender y que funcione durante muchos años", se ilusiona con el futuro de Muyè, una palabra que "proviene de las lenguas bantúes del África".
Qué dijo el chef brasileño al enterarse de la noticia.El establecimiento afectado entró en la guía Michelín 2025.
El bar de un restaurante con estrella Michelin se ha alzado con el primer premio del campeonato organizado en el marco de San Sebastián Gastronomika
El cocinero Juan Aceituno ofrece en Jaén su cocina de recuerdo, con tres menús degustación que varían en precios y pases
Unas bravas con carne de ternera y alioli han conquistado al público del Mahou Bravas Fest, mientras que el jurado se ha decantado por una alternativa con sabores asiáticos
Las imágenes muestran cómo los ladrones actuaron con total frialdad pese a la presencia de niños en el local. De acuerdo con testigos, los asaltantes llegaron a bordo de dos motos lineales y apuntaron directamente a los comensales con armas de fuego
Salió de la Argentina en 1997 con la idea de vivir una experiencia distinta y luego regresar. "No era la idea irme para no volver. Quise hacer algo diferente y me fui quedando", confesó Stella Carmen del Soñez, de 58 años. Casi tres décadas después, es dueña de un restaurante emblemático donde los sabores, los vinos y las empanadas al cuchillo mantienen viva la identidad nacional en la ciudad de Luxemburgo.Nacida en Paraná, Entre Ríos, comenzó a estudiar Bioquímica en Santa Fe, pero abandonó la carrera y se mudó a Buenos Aires para dedicarse al cine. "En ese momento era complicado vivir del arte, intenté buscar trabajo en televisión", contó. Trabajó en Cinecolor, empresa que ofrece servicios de posproducción y distribución de contenido audiovisual. El clima político de aquellos años la llevó a tomar la decisión radical de irse de la Argentina. "Sentía que todo estaba muy politizado, que mis opiniones no tenían nada que ver con el arte", recordó Soñez.Esa sensación fue el motor de su partida: primero pasó por París, donde vivía su hermano, y finalmente se instaló en Luxemburgo. El país la sorprendió por el orden y la confianza que transmitía su gente. "Me llamó muchísimo la atención que todavía valía la palabra y que la gente te hacía confianza enseguida", explicó.En ese entonces no existía el espacio Schengen y las residencias eran un trámite complejo. Sin embargo, se inscribió para estudiar idiomas y recibió un permiso indefinido que le permitió establecerse. Rechazó, sin dudarlo, la posibilidad de naturalizarse luxemburguesa a cambio de renunciar a la nacionalidad argentina. "Eso no lo voy a hacer nunca, yo seré argentina para siempre", respondió la empresaria.En el Instituto Nacional de Lenguas colaboró en la biblioteca, creó materiales audiovisuales para el aprendizaje de idiomas y hasta organizó una cantina para estudiantes. Muchos eran adolescentes refugiados de la guerra de Bosnia-Herzegovina, que encontraban allí un espacio para expresarse artísticamente y procesar los traumas del conflicto. Ese compromiso la acercó a las instituciones locales y le abrió puertas en su nuevo país.Con la llegada del acuerdo Schengen, la movilidad en Europa se simplificó y la joven entrerriana empezó a pensar en proyectos propios. Trabajó un tiempo en la televisión, principalmente en el área de montaje, aunque las dificultades con el idioma limitaron sus posibilidades. Más tarde, las leyes cambiaron y necesitaba un permiso de trabajo más estable.Desembarcar en la gastronomíaEn ese contexto intentó revalidar sus estudios de Bioquímica, pero le exigían cursar dos años de Ingeniería Química en Alemania, algo que descartó de inmediato. "Dije: no, déjeme tranquila y me puse a buscar trabajo", sostuvo Soñez. Empezó a buscar trabajo y se presentó en un restaurante brasileño que estaba por abrir: Batucada. "Nunca en mi vida había trabajado en gastronomía, pero el dueño me contrató de gerente al día siguiente. Me presenté y me dijo: 'Empezás mañana'. Y así fue", relató.Trabajó allí durante varios años, hasta que decidió independizarse. Primero lo intentó en sociedad con el dueño del local brasileño, pero la iniciativa no prosperó. Finalmente, abrió su propio espacio, sola, con la ayuda inicial de su antiguo jefe.La oportunidad era única: transformar una casa histórica en un restaurante argentino. Se trataba de un edificio protegido desde 1950 por su valor patrimonial y con varios siglos de antigüedad. La casa, que data de 1150, había albergado a monjas capuchinas, y a algunos metros se construyó la iglesia que hoy funciona como el Théâtre des Capucins. "El dueño era una persona mayor y no quería, de ningún modo, hacer un restaurante. Me llevó casi seis meses convencerlo. Cuando lo logré y vi el estado de la casa, entendí lo que significaba: era una construcción muy histórica, milenial", señaló Soñez.Para poner en marcha el proyecto, se rodeó de especialistas. Convocó a varios ingenieros y a dos estudios de arquitectura con un objetivo clave: reforzar la estructura sin alterar la esencia de la casa. Había que garantizar que el edificio pudiera soportar el peso del público, de una cocina profesional y de todas las instalaciones necesarias, pero sin modificar su carácter original. "Dejamos los techos y muros originales y adaptamos lo necesario para montar un restaurante sin alterar la esencia del edificio", detalló.Incluso la colocación del nombre en la fachada implicó un desafío: Soñez tuvo que atravesar un largo proceso burocrático y solicitar múltiples autorizaciones antes de obtener el permiso para instalar el cartel sobre los muros históricos.En 2010 inauguró su restaurante, Cafetín de Buenos Aires. Desde el primer día buscó autenticidad, empezando por la calidad de la carne. "Como vengo de Entre Ríos, conozco de carne. Hasta ese entonces, la carne que llegaba a Luxemburgo no era de la mejor calidad y yo quería un restaurante de verdad, con la mejor carne, con lo nuestro", remarcó.Descubrió que los alemanes eran los principales importadores de carne argentina y decidió viajar a Hamburgo para reunirse con la empresa Metro. Al inicio del restaurante viajaba todas las semanas para asegurarse la provisión de carne y pagar en efectivo. "Hasta que después de cuatro meses me conocieron, me tuvieron confianza y empezaron a enviarme ellos mismos la carne en camiones, como corresponde", contó. Desde hace 15 años trabaja con esa firma.Cafetín pronto se convirtió en un punto de encuentro para los amantes de la cocina argentina. "Es el único lugar en Luxemburgo que hace empanadas todavía con carne cortada a cuchillo; a la gente le encanta", dijo con orgullo.Pero no es el único producto que seduce a los visitantes: en el restaurante también brillan el lomo argentino, la tira de asado, el entrecote y el choripán con chimichurri. Las carnes tienen tanto éxito que la emprendedora argentina ofrece en venta directa carne cruda para que los clientes pueden cocinarlas en sus casas. "Saben que la calidad que tengo, ellos no la consiguen en ningún otro lado", afirmó.En la carta de postres, los alfajores de Havanna â??que trae directamente de un comercio de Españaâ?? tienen mucho éxito, aunque también triunfa con elaboraciones propias. "El panqueque de dulce de leche es el número uno, con helado de dulce de leche. Hago el panqueque de mi época: en la Argentina ahora es duro, yo lo preparo fino, con el dulce de leche calentito y el azúcar quemada por arriba, como era hace 30 años", explicó la empresaria.La búsqueda de autenticidad también se trasladó a la selección de vinos. Introdujo etiquetas prácticamente desconocidas en Luxemburgo, como Luigi Bosca. "En toda esta parte no había, en el Benelux. No había en Bélgica, no había en Luxemburgo. Y me parecía un súper vino como para empezar", contó. Con el tiempo sumó otras bodegas argentinas, como Bianchi y Familia Schroeder, ampliando la propuesta. En el Cafetín de Buenos Aires solo se venden vinos argentinos. Además de cócteles tradicionales, Cafetín ofrece tragos con nombres bien argentinos: el Maradona, el Malvinas, el Buenos Aires y el Evita.Sin embargo, la pandemia de Covid-19 alteró la dinámica del negocio. "Antes, al mediodía, hacías tres servicios. Todo eso se acabó, no solamente en Cafetín, en la restauración en general. Por las noches sigue muy bien, pero ya no es lo mismo", advirtió. Luego llegaron los efectos de la guerra en Ucrania y la inflación europea. "El estado de ánimo de los europeos no está bien. Cuando la gente no está bien, consume menos", lamentó.Aun así, no dejó de proyectar. Sueña con sumar una heladería argentina en la capital del Gran Ducado y cada año participa en la feria multicultural de Luxemburgo. El stand argentino está presente desde hace más de dos décadas, y la empresaria argentina se sumó algunos años después. "Todo lo que se recauda se manda a la Argentina, a escuelas o geriátricos, según lo apruebe el gobierno luxemburgués. Es una forma de ayudar a la gente sin pasar por la política", contó la entrerriana.Aunque lleva casi tres décadas en Europa, no reniega de su origen. "Yo represento la Argentina que no existe más, la de antes, la de la palabra y la confianza. Estoy contenta de mostrar eso, para que la gente tenga una cara distinta, que no piense que todos los argentinos son tramposos o chantas", sostuvo la dueña del restaurante.Sus hijos, nacidos en Luxemburgo, también heredaron ese vínculo. "Siempre han ido a la Argentina, les encanta. Hablan con acento argentino", destacó. Si hoy en Luxemburgo existen otros negocios argentinos, Cafetín sigue siendo el único restaurante de la zona. Y la regla de bienvenida refuerza esa identidad: todos los comensales son recibidos con un "Hola, ¿qué tal?", en español, antes de adaptarse al idioma de cada uno."Salir de la Argentina no me hizo más argentina. Siempre lo fui. Lo que descubrí estando afuera es todo lo bueno que tenemos: la inventiva, la sociabilidad, el no dejarse echar atrás por ninguna dificultad. Eso abre puertas en todas partes", concluyó.
En Italia, un restaurante que presta servicio de miércoles a domingo encontró el éxito con una fórmula singular: servir un único plato principal. Su nombre es La Rue y goza de un estilo francés. Según informó el medio italiano La Repubblica, el restaurante recibe 350 comensales diarios, clasificándose como uno de los puntos gastronómicos más referenciados de Milán.Además, agregan que su propuesta de solo ofrecer un plato fuerte, lo único que requiere del consumidor es saber en qué término desea comerse su entrecot, una carne con gran reconocimiento en Europa. Esta proteína va siempre acompañada de una buena porción de papas fritas y tiene un costo de 35 euros por plato. Aparte de esto, el establecimiento ofrece postres, pero también bebidas frías y calientes para acompañar su experiencia. De acuerdo con el diario antes mencionado, agrupándolos son más de 76 opciones.Así es el interior de La Rue el restaurante viral de Milán La razón por la que las personas se alborotan por ingresar a este restaurante es porque solo cuenta con 80 sillas, lo que lo hace un lugar exclusivo para comer. El nombre del establecimiento y la elección de su plato estrella remiten a la tradición francesa. El entrecot, cuyo significado literal es "entre costillas", se popularizó en Francia entre el siglo XVIII y XIX como corte refinado. Su denominación varía en diferentes países: côte de boeuf en Francia, chuleta de lomo en algunas regiones de España, bife de chorizo en Argentina y Uruguay, y rib eye steak en Estados Unidos.Más allá de su inspiración culinaria, los propietarios de La Rue destacan por integrar valores sostenibles en su proyecto. En su página web detallan que más de 60 de los ingredientes que utilizan provienen de productores locales, que redujeron en un 15% sus residuos anuales y que reciclan más del 50% de los mismos.Por Mariana Sierra Escobar
La empresaria ahondó sobre su participación en este proyecto
Un entrecot con patatas fritas despierta el apetitivo de los milaneses con una receta secreta y multitud de vinos franceses para acompañar
De la alta cocina a las picanterías, los premios mostraron que la gastronomía peruana sigue creciendo sin perder sus raíces. La diversidad de propuestas refuerza al país como referente culinario en la región
Jordi Tarré es chef y propietario de este restaurante de cocina contemporánea catalana, discípulo de grandes iconos de la alta cocina como Hisop o El Celler de Can Roca
Nacido en Lima en los años cincuenta, el pollo a la brasa trascendió de un secreto familiar a convertirse en símbolo nacional. Con más de 200 millones de unidades consumidas cada año, hoy es el plato más popular del país y un referente de identidad cultural
El restaurante Bodegas Mezquita de la céntrica calle Céspedes se ha alzado con un premio inédito, concedido gracias a las más de 13.000 reseñas que ha acumulado en los últimos 25 años de vida
Zohran Mamdani tiene la delantera en las encuestas para ganar la alcaldía de Nueva York con 45 puntos. A lo largo de la contienda, utilizó la comida como herramienta de campaña y plataforma política. Entre los lugares que degustó se encuentra Kabab King, un restaurante de gastronomía india que está abierto las 24 horas en Queens. Kabab King, el restaurante preferido de Mamdani en QueensKabab King está ubicado en 73-01 37th Rd, Jackson Heights, NY 11372. Se encuentra abierto los siete días de la semana, las 24 horas, y cuenta con precios accesibles que van en promedio de US$5.50 a US$19.99, según su sitio oficial. La carta se divide en 14 partes, con platillos que representan a la cultura gastronómica india y paquistaní. Algunos de ellos son: Chicken Kabab Roll: US$3.99 Beef bihari paquistaní: US$13.99 Malai Tikka: US$10.99Full Chicken Carga: US$19.99Goat Korma: US$11.99Tandoori Fish: US$19.99Además de estas opciones, el restaurante ofrece degustaciones con entrada, comida principal y postre. El valor de cada menú va de los US$20 hasta los US$30. La conexión de Kabab King con Mamdani Mamdani cuenta con una conexión muy especial con el restaurante. En 2019, grabó un videoclip para su canción de rap "Nani". La misma la escribió como homenaje a la abuela del candidato, Praveen Nair, quien entonces tenía 85 años y era trabajadora social en Delhi, India. En el video, la Sra. Jaffrey â??mejor conocida por sus papeles en la película de Merchant-Ivory "Shakespeare Wallah"(1965) y, más recientemente, en la comedia de la NBC"I Feel Bad"â?? encarnaba a una abuela gánster que se niega a someterse a los pedidos de su hijo, que exige menos intromisión y un cuidado más responsable.Luego de ese video, Mamdani se mostró en el local y participó de videos con los empleados. Incluso, interrumpió una grabación para su campaña para comer el biryani de pollo de Kabab King. "Lo siento", dijo de manera tímida frente a las cámaras, según consignó The New York Times. "Como puedes ver, tengo hambre", agregó.Mamdani y su campaña gastronómicaDe acuerdo con el medio citado, los neoyorquinos suelen prestarle mucha atención a la manera en cómo los candidatos interactúan con la comida. Debido a esto, Mamdani visitó sus restaurantes favoritos para realizar entrevistas y conferencias de prensas. A través de su campaña publicitaria en redes sociales, enmarcó su lema de campaña- "hacer la ciudad más asequible"- en torno a los puntos de referencia culinarios, como el incremento del precio del pollo y arroz. El restaurante favorito de Mamdani está en Queens y abre 20 horas: "Tengo hambre""Nueva York está sufriendo de una crisis denominada 'Halalflation', así que vamos a llegar al fondo de esto", destacó Mamdani en uno de sus videos, donde se muestra comiendo un platillo y en conversaciones con diferentes personas en puestos de comida. "Eric Adams no ha dicho nada sobre esto. Así que si fuera alcalde, buscaría que el Halal cueste US$8 de nuevo y no US$10â?³, cerró.
Se puede hacer con más o menos frecuencia, según la situación económica, pero concurrir a un restaurante y degustar alguno de los platos que se ofrecen allí parece ser una costumbre que ha existido siempre. Sin embargo, esto no es así. Alguna vez, allá lejos y hace tiempo, este tipo de recintos, tal como los conocemos hoy, no existían. Alguien debió inventar el primero. Es cierto que el hecho de comer fuera de casa se remonta a tiempos antiguos. En la Edad Media europea, por caso, los viajeros solían saciar su hambre en las posadas donde descansaban, o en las tabernas. Pero lo real es que en esos lugares no había mucha opción de elegir. Se comía lo que se servía, todos se amontonaban alrededor del mismo mesón en un horario determinado y la calidad de los platos, en general, dejaban mucho que desear. "Yo los restauraré"La leyenda más reproducida en el mundo, incluso por medios de comunicación de lo más prestigiosos, parece construida desde una gran confusión. Dice que el restaurante tal como lo conocemos hoy surgió en 1765. El cuento sostiene que un señor llamado Dossier Boulanger (que se puede traducir como "informe panadero") abrió un local en la calle Des Poulies de París, donde ofrecía más de un plato para comer, algunos sofisticados, y en mesas individuales.Se dice que este buen parisino había puesto en una de las paredes exteriores de su comercio un cartel que decía la siguiente frase con aires bíblicos, en latín: "Venite ad me vos qui stomacho laboratis et ego restaurado vos". Una traducción al español de ese letrero sería la siguiente: "Vengan a mí todos los de estómago cansado, que yo los restauraré". La restauración prometida venía en ese innovador recinto gastronómico en forma de sopas. En especial, había un caldo de carne, cebolla, hierbas y otras verduras muy sustancioso que, al parecer, restauraba tanto el estómago como el espíritu de los comensales.La palabra "restaurante", referida en principio a ese consomé reparador, se convirtió en un sinónimo de este tipo de lugares de comida que en pocos años comenzaron a multiplicarse en las callejuelas parisinas de fines del siglo XVIII. Otro nombre para el primer restauranteroOtros historiadores gastronómicos ubican al primer restaurante en la misma calle Des Poulies, con el mismo cartel en el exterior, pero afirman que el primer propietario de dicho lugar fue Mathurin Roze de Chantoiseau. Según la plataforma de divulgación The Conversation, fue este hombre, y no Boulanger, el primero en servir en mesas individuales, en ofrecer una carta y en abrir su local a todo hora, a diferencia de las posadas o tabernas que tenían bandas horarias para comer. Con los restaurantes, además, las comida se elegía a través de una carta o menú para disfrutar de distintas opciones. Muy diferente a lo que ocurría en los antiguos establecimientos, donde se comía para saciar una necesidad natural. Allí se servían platos toscos, en general, que no tenían ni remotamente por objeto deleitar el paladar. El esmero en los nuevos restaurantes también estaba puesto en ofrecer una buena vajilla, y utensilios agradables. Algo que en las posadas no ocurría: en estos lugares se solía compartir la misma bandeja para la comida y un mismo jarro, a modo de vaso, para varios comensales. Los primeros platosRebecca Spang, historiadora autora del libro La invención del restaurante; París y la moderna cultura gastronómica apunta en su obra algunos datos interesantes sobre aquellos platos que se servían en los primeros restaurantes. Además de las mencionadas sopas, añade la autora: "Los primeros 'restauradores' también se especializaban en platos que, en el siglo XVIII se consideraban fáciles de digerir, como los huevos duros, una especie de pastel de arroz y las pastas sin salsa, con mucha manteca". La investigadora gastronómica acota un dato llamativo: "Lo interesante de estos platos era su color claro, que entonces se creía que eran más ligeros y no tan pesados como el pan integral o la carne roja. Se creía que, en 'propiedades restauradoras', la apariencia era tan importante como los ingredientes de una comida". Spang dice también que fue el mismo Roze de Chantoiseau el que creó el primer plato que se convirtió en un éxito rotundo entre el público. Fue "ave en salsa de pollo", una delicia que justificaba con creces la visita al establecimiento de monsieur Chantoiseau. El pionero de los restaurantes gourmetDe acuerdo con la enciclopedia Larousse Gastronomique, una especie de Biblia de la cocina y los locales gastronómicos, el primer restaurante sofisticado o gourmet de París, por la variedad de su menú y la calidad de sus platos, fue creado por Antoine de Beauvilliers en 1782. Este hombre, que había sido mayordomo en jefe del Conde de Provenza, abrió su local en el distrito del Palacio Real, en la rue de Richelieu. Este establecimiento, que con el tiempo pasó a llamarse La Taverne de Londres, se destacaba por su lujo, ornato y porque allí se podían comer los mismos manjares que en Versalles acompañados por los vinos de una exquisita bodega. Otra versión del origen de este lujoso restaurante señala que, en realidad, Beauvilliers era un economista con ideas avanzadas, y que en realidad quería llevar a más personas del pueblo los platos que hasta entonces sólo degustaban los miembros de la nobleza. Como sea, a partir de la calidad de este primer local gourmet, se establecieron los puntos básicos que debería presentar un restaurante que se precie de tal: ambiente elegante, servicio amable, cocina superior y bodega selecta. La Revolución Francesa y la multiplicación de restaurantesAsí como la historia dice que Beauvilers abandonó por propia voluntad el hogar de nobleza en el que trabajaba, hubo otros cocineros que debieron hacer lo mismo, pero a la fuerza. Fue a partir del 14 de julio de 1789, cuando los avatares de la Revolución Francesa dejaron a los aristócratas galos sin cabeza o en el exilio, y a los empleados de sus cocinas, sin trabajo. Entonces, muchos de estos chefs decidieron abrir su propio local gastronómico, a los cuales a esa altura ya se los conocía como "restaurantes".De esta manera, las comidas que antes eran casi exclusividad de la sangre azul francesa se democratizaron, o al menos, pasaron a formar parte de las experiencias gastronómicas de la floreciente burguesía del país, que empezaba a gozar de los placeres antes reservados tan solo los estirados ambientes palaciegos. Décadas después de que se abriera aquel primer local que servía sopas "restauradoras", los restaurantes se habían multiplicado en París. Para 1834 existían casi 2000 establecimientos de este tipo en la capital de Francia. El concepto, además, estaba ya tan arraigado en la población que en el año 1835, la Academia Francesa incorporó la palabra restaurante a su diccionario con el significado con el que la conocemos actualmente. Hoy en día este es un término común en muchos lugares del globo que adoptaron tanto la palabra como la idea. En cada lugar tiene su adaptación idiomática. En la Argentina, por caso, se puede decir 'restaurant', como en francés, pero también se españolizó con 'restaurante' y hasta se argentinizó el término cuando se habla de ir a comer a un 'restorán'.
En una esquina tranquila de Belgrano, donde la Avenida Olazábal se cruza con Conde, se encuentra una bella casona de estilo inglés que estuvo abandonada durante muchos años. Tras intensos meses de obra recuperó el esplendor de sus años dorados, pero totalmente renovada como restaurante. "La casa original es de 1930 y era para los trabajadores del Ferrocarril. Con los años se fue alquilando como vivienda y se nota que estuvo llena de vida. Muchas personas se acercan a contarnos historias", expresa Belén Zanchetti, mientras recibe a los comensales y los acompaña a ubicarse en las mesas de "Casa Beza". Cuando el clima acompaña las más codiciadas son las del patio rodeado de un bello jardín con enredaderas y plantas. Allí late el corazón de la propuesta: la humeante parrilla repleta de carnes y vegetales asados. La anfitriona, Belén Zanchetti, tiene 29 años y es sommelier. "Soñé con este proyecto toda mi vida", confiesa, quien tras varios años de aprendizaje en Europa decidió regresar a Argentina para concretar un sueño familiar: abrir su propio restaurante. "La verdad extrañaba mucho. A pesar de haberme ido tan joven y por un tiempo largo, siempre amé mi país y todo lo que lo forma. Me encanta el argentino, nuestros códigos y las formas de relacionarnos; vivir afuera me hizo valorarlo aún más. Europa me dio muchísimo aprendizaje, tanto personal como en el mundo del vino y la gastronomía, pero había algo adentro que me pedía volver y crear aquí. Quería armar un lugar propio, con la energía y la calidez que tenemos acá", dice. Así la Be de Belén y Za de su apellido dieron nombre al proyecto. "Estaba totalmente abandonada y en ruinas"Convencida, buscó durante varios meses el sitio perfecto hasta que descubrió una antigua casona en alquiler. "Estaba totalmente abandonada y en ruinas, la vegetación salía para afuera y a los vecinos no les gustaba pasar por la esquina. No fue difícil imaginar cómo mejorarla y toda la vida que podía haber en ella: salones con gente, un patio con flores y mesas, una parrilla con fuego, personas disfrutando con nosotros de todo eso", rememora la emprendedora, quien se puso manos a la obra junto a su madre Cecilia y Raúl, otro de los socios. La obra duró tres meses y el objetivo siempre fue el mismo: conservar su esencia. Como Cecilia es fanática de la arquitectura y de rescatar detalles antiguos fue la encargada de llevar adelante la reforma. Fue todo un desafío. "La casona tenía mucho encanto, pero también varios detalles: caños rotos y viejos, pisos paraâ?¯restaurar ambientes que no estaban pensados para un restaurante. Recuerdo tardes enteras con mis dos socios, eligiendo pinturas, pensando dónde poner cada ventana, cortina, luces, artefactos. Fue agotador pero hermoso a la vez. Cada día que veíamos avanzar la obra, sentíamos que la casa revivía, que le devolvíamos vida", confiesa. Curiosos, los vecinos se acercaban a pispear cada uno de los avances. Todo el barrio estaba entusiasmado con la futura propuesta. "Muchos agradecían que la reconstruyamos. Otros que embellecemos el barrio y sobre todo estaban felices de que no la tiramos abajo", agrega, quien recorrió el Mercado de Pulgas, anticuarios y ferias del interior en busca de antigüedades, cómodos sillones y objetos con historia. "Lo pensamos para que cada persona se sienta relajada, como en casa de un amigo" En agosto del 2024 llegó la tan deseada apertura. Con entusiasmo ultimaban detalles: preparaban la vajilla, armaban las mesas con sus centros de flores y chequeaban ingredientes de cada uno de los platitos. Sin embargo, no todo salió como esperaban. El cielo se puso negro y comenzó a llover fuerte. Lo que parecía una simple tormenta se transformó en un diluvio. "Fue impresionante. La tormenta tiró abajoâ?¯toda la enredadera del portón de entrada. Fue una catástrofe: esa enredadera es parte de la identidad verde del restaurante, lo que lo desconecta de la calle y le da mucha alegría. Ese día no pudimos abrir y para mí fue durísimo porque era lo que más me gustaba de la casa. Pero en Beza tenemos una frase: "lo que sucede conviene". Y así fue. Meses después la planta volvió a brotar con más fuerza, una metáfora de la resiliencia del proyecto. Finalmente, pudieron abrir las puertas a fines de agosto de 2024 un día de sol radiante. La aceptación del público fue inmediata: faltaba una propuesta para sentirse "como en casa" en esta zona tranquila y bien residencial. "Lo pensamos como un lugar donde cada persona se sienta relajada, cuidada, como en casa de un amigo o amiga. Más allá de la comida y los vinos, con la ambientación buscamos crear un clima cálido y hogareño, siempre respetando la esencia de la casona antigua", explica. Así, después de décadas en silencio, la casa volvió a llenarse de deliciosos aromas, charlas interminables y brindis con vinos naturales de distintas provincias del país. Se convirtió en refugio y punto de encuentro donde vecinos y antiguos inquilinos se acercan con recuerdos y anécdotas. Algunos incluso aseguran que allí vivió un modelo famoso de otros tiempos. "Hace unos meses vino la señora Eliza, quien alquilaba la casa con su familia. Y nos contó que acá era el lugar donde se juntaba con toda su gran familia y que tenía muy lindos recuerdos. Después de eso, celebramos su cumpleaños 90. Fue algo muy lindo. Una vez entró una mujer y se puso a filmar toda la casa para su familia que ahora vive en Miami. Habían vivido ahí de chicos y se emocionó al poder entrar y al ver los cambios", resume, entre otras anécdotas. La parrilla está encendida desde tempranoSalen a la par chorizos, morcillas, matambrito, mollejas, entraña con chimi de hierbas y bife de chorizo con papines y salsa criolla. También son muy demandadas las verduras como el repollo con babaganush o el coliflor con ajo blanco, kale y almendras. Sin dudas, los fuegos son la gran estrella de este hogar que recuperó su alma. "Cuando decidimos hacer el restaurante en una casona, lo primero que pensamos fue que toda casa argentina tiene que tener una parrilla, aunque al principio no imaginábamos que fuera la gran protagonista. Aunque la idea siempre fue respetar la tradición, pero darle una vuelta más gastronómica: trabajar con pequeños productores, elegir cortes distintos, sumar vegetales a la brasa. Al inicio teníamos solo algunos platitos que salían de allí, pero con el tiempo, los vecinos empezaron a preguntar por la carne y nos alentaban a sumar más cortes y optar por porciones más abundantes y menos tapeo", cuenta. Belén anticipa que pronto se vienen cambios estacionales en la carta y que la parrilla va a tener cada vez más protagonismo. La empanada de carne (cortada a cuchillo) frita y el paté casero con chutney de estación, manzana verde y focaccia, se llevan todos los aplausos como entrada. Además, ofrecen algunos pescados como los langostinos con crema de palta cítrica y cilantro y la trucha con puré de coliflor, gremolata y ensalada de estación. La propuesta se complementa con una carta de vinos naturales cuidadosamente seleccionada por ella misma, con etiquetas que van desde Mendoza, San Juan, Salta hasta Buenos Aires. "El movimiento del vino natural busca romper con el consumo único de las cepas tradicionales y mostrar que se pueden hacer grandes vinos con otras variedades, que reflejan mucho más su lugar de origen", resume. Hay variedades para todos los gustos: desde algunas bien clásicas hasta otras menos comunes como las criollas, patricia o niagara. Para coronar la experiencia culinaria hay dos opciones: una torta húmeda con helado de crema y naranja y un frangipane con helado, crema inglesa y almendras. Puro movimiento y energíaBelén es una gran anfitriona. Ella es puro movimiento y energía. Recibe a los comensales, supervisa la cocina y no duda en sugerir alguna cepa nueva de vinos a los más curiosos. En el primer piso tiene su mayor tesoro: la vinoteca, que conoce de memoria. Estar en el servicio la gratifica. "Siempre me gustó trabajar en sala, como camarera o sommelier. Me gusta conocer gente y más aún en el contexto de un restaurante, donde las personas vienen a disfrutar y relajarse. Buscar un vino, contar la historia de cómo nació este proyecto, conocer a los clientes que vuelven seguido o a los que viajan desde lejos para venir a conocernos", dice. A un año de la apertura, su sueño ya es una realidad. "Lo que más deseo es que Beza siga siendo auténtico, que el barrio nos adopte cada vez más como su parrillita y que podamos crecer como equipo, con productos nobles y mucho corazón", remata Belén, desde aquel frondoso jardín que celebra la llegada de la primavera con sus enredaderas llenas de flores.
Pablo pide varios platos para evaluar y recomendar cuáles son los mejores del local. Pero al final se lleva una sorpresa inesperada: un gasto añadido que podría haber evitado
Un hombre comenzó a disparar desde una embarcación contra una multitud en un restaurante de Carolina del Norte. Quién es el detenido acusado de la masacre en Estados Unidos.
El concepto de este restaurante, ubicado dentro de una antigua iglesia en Nueva Orleans, ha llamado la atención de todo Estados Unidos. Además de contar con una oferta gastronómica de especialidad, también es una experiencia arquitectónica en el corazón de Mid-City.Así es el restaurante dentro de una iglesia en Nueva OrleansEl restaurante Vessel NOLA se encuentra en una iglesia que data de 1914, a solo una cuadra del tranvía del Canal y cuenta con un entorno arquitectónico único, de acuerdo con su sitio web.Este lugar prioriza a los ingredientes frescos, de temporada y locales y sigue la tradición de Nueva Orleans en cada platillo hecho por la cocina que se encuentra al mando del chef Eric Sibley, quien es nacido en Luisiana.Dentro de su menú de bebidas existe una carta de vinos variada, también cuentan con cócteles hechos al momento y cervezas artesanales únicas. El restaurante tiene un área de bar en la que se puede acceder a la barra, o usar una de las mesas comunitarias que permiten conocer a nuevas personas, además de tener espacios al aire libre en su terraza.En el 2017, solo un año después de la apertura del establecimiento, Vessel NOLA fue reconocido por Vogue Magazine como uno de los mejores lugares para comer en Nueva Orleans y experimentar la ciudad como un local, mucho más allá del Barrio Francés.Cómo llegar al restaurante Vessel NOLA en Nueva Orleans El lugar ubicado en una iglesia restaurada que tiene más de un siglo de construcción, cuenta con una oferta gastronómica de comida marina y también un menú basado en los sabores de la nueva cocina americana, que es una fusión entre las técnicas culinarias estadounidenses y extranjeras.El lugar se encuentra en 3835 Iberville Street, Nueva Orleans, y se describe a sí mismo como un sitio para beber, comer y congregarse.Su nombre, que en español significa buque, proviene de la forma del techo de la iglesia luterana en la que se encuentra, debido a que su diseño se inspiró en el casco de un barco.Cuál es el menú del restaurante Vessel NOLA en Nueva OrleansPara comer en el Vessel NOLA se necesita hacer una reservación, según su sitio web. Y se ofrece un menú variado que cambia según la hora del día, algunos de sus platillos son:Seared Scallop Risotto, arroz arborio, pecorino romano, jugo de limón, trufas negras, y aceite de cebollino.Blackened Gulf Fish, pescado ennegrecido, calabaza de verano en juliana, puré de coliflor y salsa de crema de eneldo.Shrimp Cakes, estragón, salsa remoulade, beurre blanc de cítricos y mezcla primaveral del chef.Traditional Breakfast, tocino, huevos revueltos, sémola de maíz molida en piedra con queso cheddar, galleta con queso cheddar.Blueberry Waffles, arándanos, crema de limón, mermelada de moras, pistachos, crema batida.Chicken & Waffles, tiras de pollo marinadas en suero de leche, waffles belgas y jarabe de arce.Classic Benedict, galleta de cebollino y queso cheddar, jamón chino, huevos escalfados, salsa holandesa de estragón.Boudin Benedict, bizcocho de cebollino y queso cheddar, lomo de cerdo relleno de boudin envuelto en tocino, huevos escalfados, salsa de crema de mostaza.Vegetable Frittata, con tomates, champiñones, espinacas, chalotes, cebollino, queso de cabra, y jamón o tocino.Louisiana Jumbo Shrimp & Grits, hecha con salchicha, sémola de maíz, y chedar fundido en piedra.Brunch Burger, hamburguesa de carne, queso, tomate, tocino, salsa, pan y papas fritas.Fried Chicken Sandwich, con mantequilla, pollo frito, pepinillos y papas fritas.Monte Cristo Sandwich, hecho con pan frito y jamón, pan, miel y azúcar, acompañado de papas fritas.Estas comidas van desde los US$10 hasta los US$44, además de que se pueden agregar complementos extra como huevos fritos, biscuits, tocino, papas fritas, espárragos, y se pueden pedir postres, como cheescake y crème brûlée con fruta de temporada.
La viralización del caso en redes sociales ha puesto en el centro del debate la tensión entre derechos laborales y expectativas de los consumidores
El líder del PP ha desgranado los ejes de un plan preparado en las últimas semanas por la vicesecretaria de Coordinación Sectorial, Alma Ezcurra
Ubicado en un hotel rural en pleno valle de Benasque, Casa Arcas está liderado por Ainhoa Lozano y David Beltrán, exaprendices del famoso chef vasco
Gonzalo Aramburu, chef del único restaurante argentino con dos estrellas Michelin y referente de la cocina contemporánea, fue declarado Personalidad Destacada de la Cultura por la Legislatura de la Ciudad de Buenos Aires. El reconocimiento funciona como respaldo institucional a una trayectoria que proyecta a la gastronomía local a nivel global. El cocinero formó su base académica en el Instituto Argentino de Gastronomía (IAG) y en L'École Lenôtre. Además, se perfeccionó junto a chefs de reconocimiento internacional como Charlie Trotter, Daniel Boulud y Martín Berasategui. Con la brújula orientada hacia la disciplina, la creatividad y la innovación, abrió Aramburu en 2007 en Constitución y en 2019 lo mudó al Pasaje del Correo, en Recoleta, donde consolidó una experiencia de pasos con identidad local.El punto de inflexión llegó en 2023: la Guía Michelin otorgó dos estrellas a Aramburu, primer y único restaurante argentino en alcanzar esa distinción. En la misma gala, su proyecto Bis Bistró obtuvo un Bib Gourmand. El reconocimiento legislativo llega, así, como una síntesis de una carrera marcada por disciplina, creatividad e innovación.El reconocimientoEl acto se realizó en el Salón Dorado de la Legislatura de la Ciudad de Buenos Aires. Desde el estrado, la autora del proyecto, la diputada Gimena Villafruela, ponderó la trayectoria de Aramburu y el modo en que su obra acompaña la proyección internacional de la cocina argentina."Recibir este reconocimiento en la Legislatura de la Ciudad es un honor y una responsabilidad. Detrás de cada reconocimiento hay un equipo, productores y una cadena de trabajo que nos sostiene todos los días. La cocina es una forma de contar quiénes somos y de dónde venimos; este estímulo nos invita a seguir trabajando con la misma convicción", dijo Gonzalo Aramburu en el cierre de la ceremonia.A lo largo de su carrera, Aramburu fue incluido en los Latin America's 50 Best Restaurants, distinguido como Mejor Chef de la Argentina por la Asociación Argentina de Gastronomía, premiado en The Best Chef Awards e incorporado a la red Relais & Châteaux. Su restaurante también fue destacado en los Travellers' Choice de Tripadvisor.
El Cielo es el nuevo restaurante de J Balvin en Nueva York y ya despierta gran interés entre locales y turistas. El proyecto forma parte de la cadena creada por el chef colombiano Juan Manuel Barrientos, que recibió premios internacionales por su propuesta de cocina de autor con raíces latinoamericanas.El Cielo en Nueva York: cuánto cuesta el menú para dos personasEl restaurante se encuentra en el cuarto piso del Virgin Hotels New York City, en 1227 Broadway. La oferta culinaria de El Cielo se denomina "La Experiencia" e integra un menú de degustación exclusivo diseñado por Barrientos. "Se trata de una audaz expresión de la cocina colombiana moderna, llevada a la vida en pleno corazón de Nueva York", detalla la página web.El costo por persona es de 289 dólares, lo que representa un gasto aproximado de US$578 para dos comensales. La propuesta se desarrolla a través de:Cerbatana de guayaba y anísFestival de floresAka Ebi CucayoFoie gras y borojóArepa de maíz con mantequillaLangostino noruego y fruto de palma de duraznoKampachi patarashcaÁrbol de la vidaCeviche de vieirasCangrejo real y chawanmushi de maízPapaya verdeVenado, colmenillas y yuca fermentadaPato y maracuyáHormigas limónHidromiel, mango y uchuvasPetit foursPétalos de rosaOtra propuesta culinaria, "El Viaje", consiste en un menú de degustación. "Se trata de un recorrido sensorial de sabores y creatividad", afirmaron en la página web del restaurante. Esta oferta gastronómica tiene un costo de US$189 por persona, lo que equivale a un total de US$378 para dos comensales. La carta de degustación incluye:Cerbatana de guayaba y anísFestival de floresFoie gras y borojóArepa de maíz con mantequillaKampachi a la PatarascaÁrbol de la vidaCeviche de vieirasPato y maracuyáHidromiel, mango y bayas ácidasPétalos de rosaEl Cielo: la cadena colombiana con estrellas Michelin en EE.UU.Además de estar en Nueva York, El Cielo cuenta con sedes en Washington D.C., Miami y Medellín. La cadena obtuvo dos estrellas Michelin, la primera llegó en 2021, cuando el establecimiento ubicado en la capital de Estados Unidos se convirtió en el primer restaurante colombiano en recibir esta distinción. Al año siguiente, en 2022, la sede de Miami también recibió este prestigioso galardón. Desde entonces, ambas locaciones mantuvieron su reconocimiento hasta 2024, consolidándose como referentes de la alta cocina latinoamericana a nivel mundial."El recibir una estrella Michelin no es solo un logro personal para Juan Manuel Barrientos, sino también un hito para la gastronomía colombiana. Este reconocimiento pone a Colombia en el mapa mundial de la alta cocina, destacando su potencial y abriendo puertas a una nueva generación de chefs colombianos", afirmaron desde El Cielo.El plato más icónico de El CieloSegún detalló Barrientos en una entrevista para Fine Dining Table, la propuesta más destacada es la "chocolaterapia". "No es un plato, sino un momento en el que los clientes se lavan las manos con chocolate. Ha evocado fuertes emociones en los comensales y fue una experiencia disruptiva que hemos hecho más de un millón y medio de veces", afirmó el chef. Esta preparación también fue reconocida por la guía Michelin, como una "propuesta gastronómica que se desarrolla de manera armoniosa".
Decir "provecho" al cruzarse con personas que están comiendo en un restaurante latino en EE.UU. revela una tradición que trasciende fronteras y generaciones. Este saludo, heredado de la cultura hispana, se sostiene con fuerza entre las comunidades migrantes, y su significado va mucho más allá de los modales. Entrar a un restaurante, pasar cerca de una mesa ocupada y saludar con un "provecho" es una escena cotidiana en muchos escenarios latinos. El gesto es una forma de reconocimiento hacia el otro, independientemente de que exista una relación personal. Expresa un deseo simple pero significativo: que el alimento siente bien y que la experiencia compartida sea agradable.Origen: de las cortes reales a la mesa popularEl uso de "provecho" tiene raíces profundas en la historia. Según expertos y fuentes especializadas, su origen puede rastrearse a la época del Siglo de Oro en España y a tradiciones heredadas de ocupaciones árabes. El deseo de "buena digestión" o "aprovechar el alimento" era común en banquetes cortesanos y rituales de la sobremesa en la Europa medieval. Con la colonización, la costumbre desembarcó en América Latina, donde se adaptó y expandió. Allí, dejó de ser un uso exclusivo entre conocidos y se volvió una expresión espontánea de cortesía, especialmente en ambientes donde compartir la mesa es símbolo de respeto y comunidad.A lo largo de los siglos, el saludo evolucionó y se convirtió en un código social. En mercados, comedores populares y restaurantes de México, el Caribe, Centroamérica y los Andes, el "provecho" puede ir dirigido tanto a amigos como a perfectos desconocidos. Hoy, en EE.UU., la tradición se mantiene entre los migrantes como uno de esos rituales que reafirman la pertenencia y ayudan a reconstruir lazos comunitarios.Identidad migrante y poder comunitario: por qué sigue vigente el "provecho"En las comunidades migrantes, costumbres como la de decir "provecho" cumplen una doble función. Por un lado, son una expresión de identidad: permiten que quienes dejaron su país mantengan viva una parte esencial de su cultura. Por otro, fortalecen el sentido de comunidad, transformando el acto de comer en un espacio simbólico de unión y reconocimiento, aunque sea entre desconocidos.Para expertos en sociología y psicología social, este tipo de saludos favorecen la integración, generan microclimas de confianza e incluso pueden romper la tensión inicial entre personas que comparten un mismo lugar. El "provecho" no solo es bien recibido: suele ser correspondido de forma automática, con un "gracias", un "igualmente" o un simple gesto de aprobación. No implica compromiso ni continuidad en la conversación.Diferencias culturales: lo que pasa fuera de la mesa latinaA diferencia de los países hispanohablantes, en las culturas anglosajonas y ciertas regiones de Europa, saludar a extraños durante la comida puede ser considerado una intromisión o incluso una falta de respeto. En Francia, el "bon appétit" se reserva para familiares o amigos cercanos. En el Reino Unido, el protocolo tiende a privilegiar la privacidad en la mesa. Sin embargo, el crecimiento de la gastronomía latina en Estados Unidos está logrando que este ritual, antes exclusivo de la comunidad migrante, sea apreciado y, en algunos casos, adoptado por personas de otros orígenes.Protocolo y respuestas: cómo se responde al "provecho"No existe obligación de contestar al saludo, pero la respuesta más habitual es un "gracias" o "igualmente". En algunos casos, un gesto o una sonrisa bastan para mostrar gratitud y cerrar el intercambio. El saludo jamás es percibido como invasivo en la mesa latina.Expresa cortesía, respeto y simpatía entre comensales.Su origen se remonta a rituales cortesanos europeos y la herencia mediterránea.En restaurantes latinos de EE.UU. se usa con conocidos y desconocidos.No exige respuesta formal; "gracias" o "igualmente" es suficiente.Reafirma la identidad migrante y fortalece la comunidad en contextos multiculturales.En otras culturas puede resultar inusual, pero cada vez es más aceptado en espacios concentrados de población latina.Este contenido fue producido por un equipo de LA NACION con la asistencia de la IA.
Se trata de Fogón, un fine dining donde las carnes a las brasas son protagonistas. El reconocimiento surge de las reseñas y experiencias compartidas por los propios viajeros.
La plataforma TripAdvisor ubicó a una parrilla de Buenos Aires en el primer lugar. Qué otro resto ocupó la cuarta pocisión y el list completo del top ten munidial
Degustar grandes raciones de jamón ibérico de bellota a buen precio es posible en este restaurante familiar, abierto allá por 1947, que triunfa también por sus carnes y setas
El restaurante Campo Verde Mexican Bar & Grill, ubicado en 2918 W. Pioneer Parkway, en Dalworthington Gardens, en Arlington, dentro del área metropolitana de Dallas-Fort Worth, en Texas, informó que bajará sus persianas el 24 de diciembre de 2025. Conocido por su ambientación navideña y su propuesta tex-mex, el local se convirtió en un punto de encuentro familiar.¿Qué dicen los dueños de Campo Verde sobre el cierre definitivo?Campo Verde abrió en 1983 de la mano de James "Smiley" Williams y, desde entonces, fue parte de la identidad gastronómica de Dallas-Fort Worth. Con más de cuatro décadas de historia, el restaurante dejó una marca en la memoria de varias generaciones. Fundado en 1983 por James "Smiley" Williams, fue un clásico tex-mex de Fort Worth por más de cuatro décadasEn el último año, se intentó sin éxito actualizar la propuesta. Según The Street, incorporaciones como el poblano chimichurri o el steak flambé no convencieron a un público que buscaba las enchiladas y fajitas de siempre. Tal como indicó WFAA, el restaurante incluso había programado cerrar en enero de 2025, pero los nuevos dueños, Mouhssine "Moose" Benhamacht y Liesl "Li" Best, decidieron reabrirlo en verano boreal tras una limpieza profunda y un relanzamiento del menú.Se conservaron elementos tradicionales que caracterizan al lugar, pero las actualizaciones en la cocina, las bebidas â??incluidas mejoras en margaritasâ?? y ciertos cambios en la decoración recibieron respuestas mixtas. "Los fieles querían enchiladas, no precios más altos ni transformaciones drásticas", señaló The Street en alusión a las reseñas en línea.Finalmente, los propietarios confirmaron que el 24 de diciembre de 2025 será la última noche de Campo Verde. En un comunicado enviado a medios como WFAA, Benhamacht admitió que la decisión no fue sencilla: "Campo Verde es más que un restaurante; es un recuerdo, una cápsula del tiempo. Pero recrear algo tan ligado al pasado trae desafíos reales. Queremos darle una despedida alegre y sentida".El espacio no quedará vacío: los dueños ya adelantaron que en el primer trimestre de 2026 lanzarán un nuevo concepto gastronómico, mientras continúan al frente de Café Americana en Downtown Arlington.¿Qué ofrecerá Campo Verde en su última temporada?De acuerdo con Fort Worth Star-Telegram, hasta diciembre el local gastronómico retomará su menú clásico con fajitas y tamales, además de eventos con Papá Noel y actividades temáticas. Será el adiós de un espacio conocido como "Christmas Wonderland", célebre por sus 120 mil luces y el tren eléctrico que recorría el techo."Esto marca la última oportunidad para familias y seguidores de vivir la celebración navideña desbordante del restaurante. Hemos decidido honrar esa magia con una despedida alegre y sentida", declaró Benhamacht a WFAA.Las reacciones de los usuarios por el cierre del restaurante de Tex-MexEn un grupo público de Facebook sobre gastronomía en Arlington, la noticia del cierre definitivo de Campo Verde despertó opiniones encontradas. Varios usuarios señalaron los precios elevados y la pérdida de la identidad original del lugar: "Estaba demasiado caro para lo que ofrecían. Extraño al viejo Campo Verde", aseguró un usuario.Otros remarcaron que las modificaciones terminaron por alejar al restaurante de su esencia: "Cambiaron todo menos el nombre. Los clientes esperaban una versión renovada, no algo completamente distinto". También hubo quienes consideraron acertada la decisión: "Ya no era Campo Verde. Fue bueno que los dueños se dieran cuenta de que no estaba funcionando". Otra usuaria recordó su experiencia personal: "No sé cómo se mantuvo abierto tanto tiempo, salvo quizá por la nostalgia. Íbamos con los chicos hace más de 20 años porque era divertido y barato, pero nunca fue bueno. En los últimos años, probamos volver varias veces: la comida seguía siendo mala y encima estaba carísima".
El creador de contenido Damián Cervantes entrevistó a Adams en el Centro Histórico de la CDMX. Durante la grabación, el trabajador aseguró que no le gusta el país por el trato de la gente, lo que causó indignación en internet
El hallazgo de partes de tiburón en un local gastronómico abrió una investigación sobre el comercio ilegal en el Caribe
La creadora de contenido vivió una experiencia en el local que también visitó Kendall Jenner: probó la auténtica comida puertorriqueña y compartió con sus seguidores detalles curiosos de su visita
El chef recalca en la importancia de que cada restaurante tenga su propia identidad. La música, afirma él, tiene que reflejar la cultura del chef y del propio restaurante
José Luis García-Berlanga, hijo del famoso director de cine, ha anunciado a través de sus redes sociales el cierre de su restaurante frente al madrileño Parque del Retiro
Florida posee una enorme oferta gastronómica, pero un reciente ranking puso en el centro de la escena a un restaurante que, según los críticos, ofrece una de las experiencias culinarias más destacadas de Estados Unidos: Sunny's Steakhouse. La parrilla, ubicada en Miami, fue destacada por su ambiente y platos de calidad como la mejor opción del Estado del Sol para comer carnes, pero además, mariscos y pastas.Sunny's Steakhouse en Miami: elegido como el mejor restaurante de FloridaCada año, los periodistas del New York Times recorren Estados Unidos y cenan de manera anónima para evaluar la escena gastronómica y definir una lista de los mejores 50 restaurantes del país norteamericano. En 2025, Sunny's Steakhouse de Miami se ubicó entre los elegidos. Se trata del único negocio gastronómico de Florida que ingresó en la lista y que sorprende, ya que abrió sus puertas en octubre de 2024. De acuerdo a la crítica de Brett Anderson, el interior del local se siente como estar fuera. "Un árbol de banyán da sombra a un patio interior rodeado de salones, con sus ventanas abiertas de par en par. El restaurante es, aunque parezca improbable, tan bueno como luce". Entre las diferentes cualidades de Sunny's, los especialistas destacaron su menú que, de acuerdo al sitio oficial, incluye selecciones de crudos de Florida y otras partes del mundo, proteínas cocinadas a la leña, clásicos de parrilla y las famosas pastas artesanales que solía vender el negocio de los mismos propietarios Jaguar Sun. "Esta moderna parrilla en el barrio de Little River, en Miami, va a saciar tu antojo de wagyu y foie gras. Solo ten en cuenta que el extenso menú no contiene platos de relleno", consideraron desde el New York Times. Para los especialistas, la cocina del chef ejecutivo, Aaron Brooks, logra combinar los platos claves de una parrilla, con un restaurante de mariscos deliciosos y, además, uno italiano de primer nivel. "La pasta es magnífica", aseguraron sobre los famosos platos que había popularizado a Jaguar Sun."Súmale el espectacular pollo a la brasa y tienes algo nuevo bajo el sol: una ostentosa parrilla del sur de Florida que vale la pena incluso después de pagar la cuenta", consideró Anderson.Sunny's: la nueva parrilla que mantiene la esencia de Jaguar SunDurante la pandemia, los propietarios de Jaguar Sun, Carey Hynes y Will Thompson, inauguraron Sunny's Steakhouse, un restaurante temporal al aire libre en Little River que ganó popularidad rápidamente e inspiró la apertura de Sunny's Steakhouse en 7357 NW Miami, de acuerdo a Eater.Desde el local aseguraron que Sunny's tiene sus raíces en la parrilla y que su estilo contemporáneo busca reflejar el lugar de Miami en el que se encuentra ubicado, donde predomina la comunidad migrante.La parrilla abrió sus puertas en octubre de 2024, con el equipo del Jaguar Sun y algunos de sus platos esenciales. Rápidamente, fue galardonado como "Mejor Restaurante de Estados Unidos" por Bon Appetit y, ahora, recibió otra distinción como uno de los mejores por el New York Times.El local permite hacer reservas con hasta 30 días de anticipación y está abierto de domingos a sábados, es decir, toda la semana, de 17.30 a 23 hs. "Sunny's es una cena de gala con comida, bebidas y servicio de primera clase", asegura el lugar.
La tapa del chef Carles Soriano, cocinero al frente de los fogones de Casa Víctor desde octubre de 2023, conquistó al jurado del Concurs de Catalunya de Pintxos i Tapes
Los jueces han ordenado la reincorporación del trabajador a su puesto
"Necesitamos volver a sentarnos en una mesa: basta de delivery", afirma Sandra Marina desde su íntimo restaurante El Mercado de las Ranas, en el bohemio barrio de Parque Patricios. Solo tiene cuatro mesas y espacio para diez comensales que forman una cofradía que intenta recuperar la charla y los aromas de recetas que Marina conoció en sus viajes por el mundo. Tiene 66 años y es socióloga, y tuvo muchas vidas antes de llegar a las ollas. Con sus últimos 1000 dólares de ahorro tiró una flecha dorada: alquiló una vieja tienda de ropa de bebé a 50 metros de la maternidad Sardá y, en 2019, abrió "su lugar en el mundo" donde cocina según los productos que encuentra en el mercado del barrio. También recuerda recetas de sus viajes en mochilera por Grecia, España, Italia, España y por América Latina."Necesitamos conocer pequeños mundos", afirma Marina. Su restaurante es como si fuera el living de su casa. "Es una extensión de mi hogar", dice. En estanterías hay recuerdos de sus viajes, ropa, un oráculo de lotería mexicana, pequeños cuadros de ciudades europeas, libros, artesanías, viejos pasacasetes, y botellas de países lejanos. Después de recorrer el mundo, regresó al país con la vuelta de la democracia, para volver irse a San Salvador Bahía, tener su hijo y regresar a la Argentina."La gastronomía me guía: sabía que el camino estaba ahí", cuenta. Intuitiva, audaz y una mujer que hace de la libertad un culto, su pequeño restaurante es su declaración de principios, su manifiesto ante el mundo. "Estamos bombardeados por un consumo extremo liderado por las redes sociales", afirma Marina. Reflexiona mientras los transeúntes entran y piden empanadas o pan turco. El caos de la ciudad, no entra en este pequeño mundo."Tenemos esto: ahora la premisa es conocer un lugar nuevo por semana. Siempre algo nuevo. Lo que está de moda, lo cool, sacar fotos para las redes pero después nunca regresan a los lugares, existen demasiados estímulos, se perdió el sentido de ser cliente de un restaurante", piensa Marina. Su respuesta a este movimiento autómata social se expresa en sus cuatro mesas dentro de un espacio de apenas 45 metros cuadrados. Una pequeña pieza de tranquilidad, dentro de un inmenso rompecabezas urbano."Tenemos que recuperar la intimidad", confiesa Marina. Entonces la trama en El Mercado de las Ranas es sencilla e intuitiva, austera: como la personalidad de su creadora. Los comensales reservan mesa y se entregan a la sorpresa. "Me inspira saber que vendrá gente: es como cuando recibís visita en tu casa", dice. Entonces hace su magia en los fuegos. Trabaja sola. "No puedo tener un ayudante, pero también honro mi personalidad", dice. Con las reservas, comienza a preparar sus platos. "Yo pongo mi música, no negocio con nadie mi música". Mientras la Avenida Caseros (a solo 50 metros), el Sardá y el colegio Bernasconi ebullen de actividad, en la cocina de Marina, los acordes de alguna bossa nova y canciones bahianas declaran un estado de gracia."Todo lo que me da tiempo para preparar, lo hago. Te doy la bienvenida, explico lo que podes comes y a disfrutar", argumenta el guion de esta calma experiencia gastronómica en un barrio donde comienza a formar parte de la agenda foodie de la ciudad de Buenos Aires.El pequeño salón se puede retratar en un plano corto, y es lo mejor que le puede pasar a la idea de Marina. "Yo siempre supe que necesitaba un lugar muy pequeño", dice. No es en vano la elección. En una de las vitrinas donde antes había ropa de bebé, ahora se exponen diferentes marcas de gin. Marina ama el gin. "Tengo mi música y mi gin: este lugar es mi vida".Por la mañana, los clientes entran apurados buscando la solución rápida: empanadas. No son iguales a las demás. "Los hago muy ricas", afirma. Es una receta que le posibilitó tener el restaurante. Durante seis años las vendió de manera ambulante en la calle, en marchas, en plazas y cuando comenzó a estudiar Sociología, encontró una posibilidad. "Yo veo señales y las sigo: es intuición pura", confiesa. Llegó a vender 400 por día para el centro de estudiantes. Comenzó a trazarse objetivos y de a poco comprar elementos para hacer su próximo movimiento de piezas: heladeras, freezers, cocina industrial. A comienzos de 2019, caminando por Parque Patricios vio otra señal: el local y a fines de ese año, alquiló y abrió. "Siempre fui antisistema, me rebelé a lo establecido, pero mi cocina es una fusión de lo tradicional con lo moderno", dice Marina. Lo revolucionario aquí es promover el intercambio de miradas, la conversación, la sorpresa y quizás iniciar una amistad con la mesa de al lado. "Los restaurantes en Buenos Aires son lugares donde se crea comunidad e identidad", afirma. El menú varía entre guiso de lentejas, potaje de garbanzos, hamburguesas de avena, lentejas y carne, pastas caseras como tortellinis de roquefort y peral salteado con espárragos y repollitos de Bruselas, tortilla de papas, sopa de espinaca y empanadas, las más celebradas las de osobuco y de puerro y mozarella. "Pero puedo hacer recetas de todo el mundo", sostiene Marina. Si vida pasada es una base de dato emocional que usa para ejercer ese efecto de la sorpresa con recetas como el pan turco que ofrece en el mostrador. A los 24 años emprendió un viaje que la llevó por Grecia, allí se enamoró de un peruano y trabajaron en las cosechas de estación. Se movían a dedo, descubrieron los últimos vestigios de ese movimiento de viajeros de los 60 y 70 que iban por el mundo, explorándolo, guiados por la libertad de dejar el destino en manos de la suerte. Acaso nadie narró este estilo de vida como Jack Keroauck en su libro En el camino.Dueló la separación de su amor al norte de Italia, y luego se fue Cerdeña y allí se unió a un grupo que seguía una agenda de fiestas, como la de la Luna en Santa Teresa Gallura, de allí se fue al País Vasco, regresó al país con la democracia y en 1983 se fue a San Salvador de Bahía donde tuvo su hijo, que la ayuda en el restaurante. Vinieron otros destinos, pero entendió que había que regresar y parar. Estudió y se recibió de Socióloga en la UBA. En 2019 aplomó esa idea con el restaurante. "Ahora viajo por gastronomía, para conocer nuevos aromas", afirma. El último viaje lo hizo hace dos años a París, donde realizó una pasantía en L'orillon bar du quartier con el chef Hugo Giudicille."Acá paso la mayor parte de mi vida", dice. Una mesa la guarda para amigos y para cuando tiene tiempo, leer y escribir. Sabe que vivimos una época crítica, la gastronomía es uno de los sectores más perjudicados por la crisis económica. El agua, por ejemplo, desde el primer día, es lo primero que pone y repone en la mesa. "Jamás voy a cobrar el agua, te doy la opción que puedas comer con agua", dice Marina.Reniega de las aplicaciones de delivery. "No me interesa tenerlas", afirma. Esgrime una razón: el plato no llega a buena temperatura y generalmente mezclado. "Tenés que venir al restaurante porque yo emplato de una manera para que entiendas lo que estás comiendo", dice. "Explico la receta y te cuento cómo la hice de la misma manera que a mí me la contaron: la información tiene que compartirse", sostiene Marina. Mientras tanto, una bossa nova ameniza el recoleto refugio de humanidad. ¿Por qué El Mercado de las Ranas? Porque así se conocía en el pasado a Parque Patricios. "Desde que abrí me llaman para saber si en el menú las tengo", dice. Su respuesta es propia de su manera de ver la vida: en forma colectiva. "Jamás haría un plato con un producto costoso: todos tenemos que poder venir a sentarnos a un restaurante a comer", confiesa la socióloga viajera. Le duele la realidad. "Todo lo que gano es para pagar el alquiler, pero me niego a cerrar: los gastronómicos, resistimos o morimos".
La Llarga es escuela de cocina de día y bar de cócteles de noche, y se encuentra en el barrio valenciano de Russafa
La casona restaurada, la carta innovadora y la experiencia pensada para compartir distinguen la propuesta de Adriano en la capital
Los hechos ocurrieron en Francia en un restaurante en el que era un cliente habitual
El cocinero de DiverXO ha compartido a través de su cuenta de Instagram una reflexión sobre el panorama gastronómico madrileño
La policía tuvo que lanzar gases lacrimógenos para dispersar a la multitud
Indecopi determinó que el restaurante, propiedad de Jonathan Maicelo, no solo difundió información engañosa sobre la oferta, sino que también incumplió con responder un reclamo formal y presentó deficiencias en su libro de reclamaciones, lo que le valió multas y medidas correctivas obligatorias
Este viernes 19 de septiembre, la cadena de comida Salad and Go cerrará todas sus sucursales de Houston, Texas. Este emblemático restaurante de ensaladas busca concentrar sus esfuerzos en los locales que se mantienen abiertos en Dallas y otros puntos de Estados Unidos.Cuáles son los locales de Salad and Go que cierran en Houston el 19 de septiembreTodas las sucursales de Salad and Go en Houston funcionarán por última vez este viernes 19 de septiembre. La cadena anunció esta semana el cierre de 41 locales, entre los que se encuentran todos los de esa ciudad. También hay otros que dejarán de funcionar en Austin, San Antonio, Dallas-Fort Worth y en el estado de Oklahoma. La fecha fue confirmada por los empleados de los locales en comunicación con Chron. Según explicaron los trabajadores, las autoridades les informaron la noticia durante una reunión. "Esta es una decisión muy difícil porque afecta a miembros del equipo que han demostrado una pasión y un compromiso extraordinarios al servir a nuestros clientes. Estamos profundamente agradecidos por sus contribuciones y las conexiones que han forjado en sus comunidades", manifestó Mike Tattersfield, director ejecutivo de Salad and Go, en un comunicado, según informó Nation's Restaurant News.Los motivos del cierre de 41 locales de Salad and GoCon el cierre de los más de 40 locales, la cadena busca potenciar su presencia en el área metropolitana de Dallas y Oklahoma. "Concentrar nuestros esfuerzos nos permitirá fortalecer la marca e invertir más en mejorar la calidad, impulsar la innovación y construir una comunidad", sostuvo el directivo.En esa misma línea, enfatizó: "Nuestra presencia en Texas se mantendrá sólida en Dallas. Seguimos creyendo en el mercado texano y su potencial a largo plazo".Además, aseguró que las tiendas de Phoenix y Tucson, en Arizona, y de Las Vegas, en Nevada, continuarán sus operaciones. "Sabemos que el cambio en última instancia nos dará la base que necesitamos para crecer más fuertes y hacer que alimentos deliciosos y nutritivos sean accesibles para todos", concluyó.Quiénes son los dueños de Salad and Go Salad and Go abrió por primera vez en 2013 en Gilbert, Arizona. Fue fundada por Tony y Roushan Christofellis. Actualmente, la cadena de ensaladas para llevar es propiedad de la firma privada Volt Investment Holdings, cuya sede principal se encuentra en la ciudad de Nueva York. A finales del 2024, la firma contaba con 146 restaurantes en Estados Unidos, según informó Nation's Restaurant News. El actual director ejecutivo, Mike Tattersfield, quien también es uno de los accionistas minoritarios de la marca, asumió su cargo en abril de 2025. Entonces, ocupó el lugar que quedó vacante tras la renuncia de Charlie Morrison, quien había logrado duplicar la cantidad de locales durante su gestión. Los restaurantes le ofrece a los clientes ensaladas, wraps, sopas y burritos para llevar. "En Salad and Go, nuestro propósito es hacer que la comida deliciosa y nutritiva sea accesible para todos", explicó Tattersfield. Por último, concluyó: "Creemos que esta marca tiene el poder de cambiar la percepción de la gente sobre la comida rápida al ofrecer algo mejor, más saludable y más asequible. Por eso me uní a esta empresa y sigue siendo la razón por la que creo firmemente en nuestro futuro".
Los asaltantes sustrajeron diversos objetos de valor, incluyendo electrodomésticos, computadoras, celulares, consolas, insumos de cocina, cerveza y alimentos, con pérdidas estimadas en 30 mil soles
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Grecia Ríos, una migrante venezolana que vive en Estados Unidos, contó en sus redes sociales que cuando extraña su tierra natal y su cultura, se prepara una comida típica de su país: el Pabellón Criollo. "Es una de las cosas que me hace sentir cerca del terruño", afirmó la joven que trabaja en un restaurante. Y señaló que este plato, además de ser "delicioso", es un "símbolo de la identidad nacional" en Venezuela. Pabellón Criollo: el plato venezolano declarado Patrimonio Inmaterial en 2019Ríos, una joven venezolana que emigró a Estados Unidos y que trabaja como mesera en un restaurante, publicó en su canal de YouTube un video en el que reveló cuáles son para ella los únicos ingredientes que lleva el Pabellón criollo, una comida de su tierra natal que tiene un significado especial para ella y sus compatriotas. "Este plato típico no solo es delicioso, sino que representa la unión de las raíces que dieron origen a nuestra identidad", sostuvo.Según dijo, el Pabellón criollo es mucho más que una comida. "Es un símbolo de identidad nacional y de la mezcla cultural de Venezuela", afirmó.En su relato, detalló qué simboliza cada componente de este plato: "Las caraotas negras simbolizan la influencia africana, el arroz y la carne mechada representan las tradiciones europeas y el plátano nos conecta con nuestras raíces indígenas". Esta comida es tan popular y representativa de la cultura venezolana que, desde 2019, el gobierno de ese país latinoamericano la incluyó dentro del listado de Patrimonios Inmateriales de Venezuela. Según consignó El Estímulo, ese año la Asociación Culinaria de Venezuela logró la distinción de seis platos típicos de la gastronomía local: la arepa, el casabe, el dulce de lechosa, el pabellón, la hallaca y la cachapa.Cómo los migrantes venezolanos encuentran en la cocina un lazo con sus raícesGrecia contó que este plato venezolano es, para ella, un lazo directo con su país. "El Pabellón Criollo es una de las cosas que me hace sentir cerca del terruño y eso me gusta", relató la joven.También explicó cómo, muchas veces, sus emociones influyen a la hora de elegir qué alimentos comer. "A veces el cuerpo te pide cosas. Pues el mío me pedía algo así, algo livianito, algo que me recordara al terruño", dijo. De esta manera, expresó la nostalgia que sienten muchos migrantes que viven lejos de su lugar de origen y de sus seres queridos, que encuentran en la cocina una forma de volver, aunque sea por un momento, a los sabores de su casa y de sus raíces.Ingredientes originales del Pabellón Criollo venezolano: carne, arroz, caraotas y plátanoEn su video, la migrante venezolana comentó que no todos sus compatriotas preparan el Pabellón Criollo como ella. Según dijo, muchos lo hacen con más ingredientes que, en su opinión, no son necesarios.Para ella, esta receta típica de su país necesita solo cuatro ingredientes clave:Carne mechada, guisada con condimentos.Caraotas negras, como aporte de la tradición africana.Arroz blanco, que da equilibrio al plato.Plátano frito, en tajadas doradas que completan el sabor."Seguramente van a salir con que le faltó queso, le faltó huevo, le faltó aguacate. Para mí el pabellón tradicional es así", aseguró. Y para no dar lugar a dudas, remarcó que el plato no necesita "nada más".
Un nuevo proyecto hotelero convierte un histórico edificio veneciano en un alojamiento glamuroso con una gastronomía de primer nivel.
Después del episodio, los propietarios del Sai Surbhi señalaron que su motivación es "advertir a otros comerciantes"
Los afectados reconocen que ha sido un accidente y no emprenderán acciones legales
Patrick Mahomes y Travis Kelce, jugadores de los Kansas City Chiefs, le regalaron a sus fanáticos un vistazo del menú que será parte de su nuevo restaurante 1587 Prime, el cual abrirá el próximo 17 de septiembre, en Kansas City, Misuri. La bebida que sorprendió a todos se llama The Alchemy, y es un cóctel que está inspirado en Taylor Swift, la cantante y prometida del ala cerrada.The Alchemy, la bebida inspirada en Taylor Swift que será parte del menú de 1587 PrimeThe Alchemy, la bebida que será parte del menú del restaurante de Patrick Mahomes y Travis Kelce, lleva el nombre de la canción perteneciente al álbum The Tortured Poets Department de Taylor Swift, la cual ha sido señalada por los swifties como la primera melodía romántica dedicada al jugador de los Chiefs, de acuerdo con Glamour. Durante una entrevista para el programa de radio The Drive, Patrick Mahomes habló sobre la bebida dedicada a la estrella de pop."No soy un gran bebedor de licor, pero he escuchado que es una bebida realmente buena y, obviamente, queríamos hacerle un homenaje a Taylor y a lo importante que es, no solo para nosotros, sino también para esta ciudad", expresó.Asimismo, confió en que a los clientes le gustará la bebida, debido a su teatralidad y aseguró que será un éxito de ventas.El cóctel contiene una mezcla de vodka clarificada con cítricos, curaçao seco, bayas de aronia, arándano, fresa, lima y té oolong, de acuerdo con People.El restaurante también contará con otras bebidas que hacen referencia a las vidas de sus fundadores, tanto a los deportistas como a sus parejas, entre las que se encuentran:Queen B: una referencia a Brittany Mahomes, esposa del quarterback.Show Time: un homenaje al apodo de toda la vida de Patrick.Big Yeti: hace referencia al apodo de Kelce cuando jugaba baloncesto.Cuándo abre el restaurante 1587 PrimeEl nuevo restaurante inspirado en los números de las camisetas de los jugadores de fútbol americano está programado para abrir este mismo año dentro del Loews Kansas City Hotel, de acuerdo con Forbes.A través de una publicación en Instagram, el local gastronómico anunció que desde el pasado 20 de agosto a partir de las 13.00 hs, tiempo del Este de Estados Unidos, se podían realizar las reservaciones para la fecha de apertura, que será el miércoles 17 de septiembre.Así luce por dentro el restaurante de Patrick Mahomes y Travis Kelce en Kansas CityEste espacio ocupará cerca de 10 mil pies cuadrados (alrededor de 9 mil metros cuadrados) y dos pisos completos, en los cuales se ubicarán comedores privados, exhibición de carnes y una cocina de autor, detalló Today. Tendrá una de las colecciones de vinos más grandes de Missouri y la decoración hará referencia a los logros más importantes de Patrick Mahomes y Travis Kelce en su carrera deportiva.El restaurante ya cuenta con un sitio web donde ya se pueden hacer las reservaciones y conocer un poco más acerca los detalles del complejo culinario. Incluso, permite la opción de registrarse para recibir actualizaciones sobre la apertura y otras curiosidades del lugar. Kealce y Mahomes aficionados a los restaurantes Noble 33El grupo hotelero Noble 33, socio de los jugadores de fútbol americano, cuenta con espacios en West Hollywood y Toronto, entre otras zonas de los Estados Unidos, de acuerdo con su sitio web.Patrick Mahomes y Travis Kelce compartieron un video en el que probaron algunos de los platillos que serán parte del menú e incluso compartieron su afición por los restaurantes de esta cadena hotelera, por lo que decidieron unirse para desarrollar su propio concepto restaurantero con su toque deportivo. "Travis y yo somos visitantes habituales de los restaurantes de Nobles 33 en otras ciudades, así que nos pareció lógico traer algo especial a nuestra comunidad en Kansas City", comentó Mahomes, de acuerdo con People.
Mariam, una joven migrante de 25 años oriunda de Georgia â??país ubicado en la región euroasiática del Cáucasoâ?? y dueña del restaurante Mamali NYC en Greenwich Village, Nueva York, fue increpada por un cliente que le exigió que "hablara buen inglés". Ella registró el momento en un video y lo compartió en TikTok, donde se volvió viral.¿Qué ocurrió en Mamali NYC con el cliente que la criticó por su inglés?En la grabación se observa a un hombre discutir con Mariam porque no entendía cómo ella pronunciaba la palabra "bowl". Pese a que la dueña del local ubicado en la 70 Christopher Street, le explicó con calma que es inmigrante y que su inglés no siempre es perfecto, el cliente la interrumpió: "Estás trabajando en Estados Unidos, deberías hablar buen inglés. Eso no es una excusa", reclamó, en tono elevado. Fue increpada en su restaurante de Nueva York por su acentoEl hombre llegó incluso a preguntarle cuántos años llevaba en el país y, al escuchar que eran cuatro, insistió: "¿Cuatro años y no pensaste en aprender mejor inglés?". Más tarde reclamó hablar con otro supuesto dueño "que hable mejor inglés", a lo que Mariam respondió que ella era la única propietaria.En el texto que acompañó el video, Mariam reconoció: "Tal vez todavía tengo un acento y no sé el significado de todas las palabras, pero estoy intentando aprender".Varios usuarios le aseguraron que "su inglés es perfecto" y que, en realidad, "habla mejor que muchos estadounidenses nativos". Otros cuestionaron la doble vara de quienes "exigen a los inmigrantes hablar un inglés impecable, pero luego viajan a Francia o Italia y esperan que los atiendan en inglés sin aprender la lengua local". Hubo quienes calificaron la actitud del hombre como racista y defendieron el derecho de Mariam a "negarle el servicio y hacerlo salir del local". La respuesta de la joven ante el apoyo que recibió en redesFrente a la ola de respaldo, Mariam publicó un segundo video en el que agradeció emocionada: "Un extraño me insultó por mi acento, pero después recibí amor de miles de desconocidos de todo el mundo. Estoy muy feliz y agradecida".El cliente cuestionó su pronunciación de la palabra "bowl"En esa grabación amplió el mensaje: "Si no fuera por ese hombre, no hubiera conocido a personas tan increíbles. Vinieron muchos clientes, me llamaron desde Canadá, Australia, Suiza, de todas partes".La historia de Mariam, de Georgia a Nueva YorkMariam se define como una estudiante informal que cambió el rumbo de su vida al llegar a Estados Unidos. Según la presentación publicada en la página oficial de Mamali NYC, su idea inicial era continuar sus estudios, pero tras instalarse en Nueva York descubrió que la ciudad la atrapaba con su ritmo vertiginoso. "Me rechazaron más de una vez, pero seguí adelante", escribió en la sección Our Story.Con el dinero que sus padres habían destinado para su educación, decidió arriesgarse y abrir su propio local. "Tomé todo ese dinero y empecé esta aventura. No sé exactamente qué estoy haciendo, dónde estoy ni qué va a pasar, pero cada segundo es muy interesante", relató.La emprendedora explica que el nombre y la esencia del restaurante están inspirados en su infancia en Georgia. "Esta historia habla de mi niñez, de una simple mañana soleada y ruidosa en el pueblo, donde viven nuestros recuerdos más preciados", resume.
Tras la intervención oficial, se ordenó el sellamiento temporal de una zona de la cocina y se exigieron acciones correctivas, mientras el restaurante mantiene su operación y asume compromisos para mejorar la protección de clientes y empleados
Tras 400 años cerrado al público, el complejo Borgo Laudato Si' inaugurará un espacio de cocina ecológica que reservará un porcentaje de su carta en homenaje a la etapa pastoral del Sumo Pontífice en el país sudamericano
En esta receta, los puerros se asan en horno, lo que les consigue un sabor dulce y una textura suave, complementándose con una carbonara con yema de huevo y queso parmesano
Varios usuarios han utilizado la sección de comentarios para exponer que la queja del consumidor resulta "absurda"
Los ciudadanos fueron intimidados con armas y los delincuentes los acorralaron para arrebatarles sus pertenencias de valor
El presidente estadounidense y varios miembros de su gabinete quisieron mostrar que la capital del país es "más segura" y fue interrumpido por manifestantes pro palestinos. Leer más
WASHINGTON.- El presidente norteamericano Donald Trump y varios miembros cercanos de su gabinete cenaron el martes por la noche fuera de la Casa Blanca en Washington, en un gesto que pretendía mostrar los beneficios de su despliegue de la Guardia Nacional y la federalización de la fuerza policial en la capital del país en un supuesto esfuerzo por combatir el crimen.Trump recorrió poco más de 150 metros hasta Joe's Seafood, Prime Steak & Stone Crab, un reconocido restaurante de mariscos en la calle 15 del cuadrante noroeste de la ciudad, y aprovechó su encuentro con los medios para asegurar que sus medidas habían convertido a Washington en "una zona segura".La comitiva de Trump, en la que se encontraba el vicepresidente JD Vance, el secretario de Estado Marco Rubio y el secretario de Defensa Pete Hegseth, fue recibida por gritos a favor y en contra de la administración. Manifestantes opuestos a la política norteamericana de apoyo a Israel en su guerra con Hamas en Gaza abuchearon al presidente."Estamos parados justo en el medio de Washington, DC, que como saben, durante el último año fue un lugar muy inseguro â??durante los últimos 20 añosâ?? y ahora prácticamente no tiene crimen", dijo Trump a los periodistas antes de entrar al restaurante.El republicano añadió que no se habría parado "en medio de la calle" en la capital norteamericana hasta hace un par de meses y dijo que ahora "la gente está saliendo a cenar cuando no lo hacía desde hacía años".En la cena también estuvieron presentes Susie Wiles, la jefa de gabinete de la Casa Blanca y la secretaria de prensa norteamericana, Karoline Leavitt. Además de Washington, Trump desplegó a la Guardia Nacional en Los Ángeles en junio y ha amenazado con enviar tropas a otras ciudades, en su mayoría gobernadas por demócratas, como Baltimore, Nueva Orleans y Chicago, donde las autoridades estatales y locales ya se preparan para operaciones destinadas a intensificar drásticamente la aplicación de las leyes migratorias.El martes por la noche dijo: "Muy pronto vamos a anunciar otra ciudad a la que iremos", y añadió que el anuncio podría ocurrir tan pronto como el miércoles. El presidente dijo que el alcalde de esa ciudad y el gobernador del estado "estarían encantados de que estuviéramos ahí".La excursión resultó llamativa dado que Trump rara vez cena fuera de la Casa Blanca cuando está en Washington. Y estas salidas se han vuelto aún menos frecuentes desde que vendió el hotel que llevaba su nombre a pocas cuadras, que fue un punto clave de reunión para funcionarios de su administración y simpatizantes durante su primer mandato.La cenaDespués de entrar al restaurante, un video publicado en redes sociales mostró a Trump estrechando la mano de algunos comensales en el interior, que lo recibieron con aplausos. Por otro lado, un pequeño grupo de manifestantes con banderas palestinas lo esperaron cantando: "¡Liberen DC! ¡Liberen Palestina! ¡Trump es el Hitler de nuestro tiempo!".El presidente se les acercó y se lo vio hacer un breve gesto, aunque no pareció dirigirles la palabra.Vean cómo recibieron a #Trump #JDVance y al jefe de Defensa en un restaurante en #WashingDC Le dijeron al presi convicto q era Hitler en su cara. #KengNamping #lovefighters #AsiaCup #savesaisawat pic.twitter.com/GufANLb3Cj— ð??¼ð??¼ð??°ð???ð??¸ð??¿ð??¾ð???ð??° ð??µð??· (@MMariposa31) September 10, 2025Algunos restaurantes han reportado una caída en las reservas desde que Trump anunció por primera vez el despliegue de las fuerzas federales el 7 de agosto, mientras que ha habido frecuentes protestas callejeras en rechazo a sus medidas.Al mismo tiempo, el aumento de la presencia militar y policial ha provocado en ocasiones enfrentamientos entre residentes y autoridades en barrios normalmente tranquilos. Según informó la Casa Blanca el martes, desde que Trump anunció por primera vez sus medidas se produjeron casi 2200 detenciones en la capital.Trump insiste, no obstante, en que sus amigos le dicen que los restaurantes locales están llenos y que la gente ha notado una caída en el crimen. Afirma además haber escuchado que la población valora el trabajo de las cuadrillas que retiran campamentos de personas sin hogar como parte de la ofensiva.Tras el regreso de Trump a la Casa Blanca, pasadas las 10 de la noche, Leavitt informó que el presidente había comido cangrejo, camarones, ensalada, carne y postre.Agencia AP y diario The New York Times
El reconocimiento consolida la propuesta peruana en una lista dominada por Italia, EE. UU. y Brasil, y refleja la capacidad de adaptación local
Este término, además, de "caribe" se suelen usar en el país cafetero para hacer alusión a cobros excesivos o considerados como pasados de la tarifa normal
El periodista Jorge Carbajal reveló que la exalcaldesa de la Cuauhtémoc adquirió el inmueble como parte de la expansión de su empresa SC Diamond Group
Pidió no acudir a su puesto por el duelo tras la muerte de una familiar. Horas después cenaba con su pareja y asistían a un espectáculo de fuegos artificiales
El jurista Camilo Rojas aseguró que las afirmaciones que rondan en medios de comunicación ponen en riesgo la seguridad de Laura Villamil y su familia
Ubicado en un caserío con vistas a la montaña, Garena está liderado por el chef Julen Baz y cuenta con dos espacios diferenciados, cada uno con su propuesta gastronómica particular
Según el ministro, ya dio la orden para que la cartera adelante las acciones de inspección, vigilancia y control de manera inmediata
Los uniformados fueron identificados de manera extraoficial como el intendente Willi Walberto Carabalí Carabalí y el patrullero Fabián Andrés Robayo Rocha, adscritos a la subestación de Policía del corregimiento de San Joaquín
Ante la imposibilidad de cobrar con tarjeta, el propietario permitió que los comensales abandonaran el local sin abonar el importe en el momento
El chef ha inaugurado este verano su nuevo proyecto, dos conceptos que conviven en un mismo local â??Tradición y Atelierâ?? y con los que espera recuperar las estrellas Michelin del Hotel Único
Según los reportes oficiales, en el accidente no resultaron heridos ni la conductora ni terceras personas
El empresario intentó sin éxito captar clientes de último momento para cubrir la ausencia
Meximodo, el restaurante mexicano de Metuchen que ostenta el récord por la mayor variedad de tequilas y mezcales en el mundo, confirmó que abrirá dos nuevas sucursales en Nueva Jersey en 2026, además de la que ya tienen prevista para este año.¿Dónde estarán los nuevos locales de Meximodo en Nueva Jersey?De acuerdo con la publicación de NJ.com, la apertura en Marlboro, prevista para fines de 2026, se ubicará en 133 South Main Street, sobre la ruta 79, en el edificio donde funcionaron Fireside Grill & Bar y Bad Hat Dumplings and Cocktails.En Parsippany, la nueva sucursal que se abrirá el próximo año funcionará en District 1515, un complejo residencial y comercial de lujo situado junto a la ruta 10. Sobre la expansión, TJ Pingtore, vicepresidente senior de Le Malt Hospitality Group â??la compañía que opera Meximodoâ?? señaló a NJ.com: "Cada espacio tiene algo único".Vale recordar que en marzo el grupo ya había anunciado otro local en Jersey City, programada para abrir en la primavera/verano de 2025. El nuevo espacio estará ubicado en el edificio Haus25, en el centro de la ciudad, y combinará un menú inspirado en la cocina regional mexicana con un diseño innovador.Meximodo y su récord Guinness por más de 1000 tequilasEl local abrió en Metuchen a fines de 2023. En julio de 2024 recibió el reconocimiento de la World Record Academy por ofrecer la mayor colección de espíritus de agave en un bar-restaurante. Superó las 1000 botellas, entre tequilas y mezcales, lo que lo convirtió en un referente gastronómico del estado.En agosto de 2024, la revista Forbes publicó un listado con los mejores bares de mezcal en Estados Unidos y allí incluyó a Meximodo Cocina Mexicana & Tequila Bar, en Metuchen, Nueva Jersey. El artículo destacó que entre sus especialidades sobresalen la Margarita y las degustaciones en formato de mezcal flights, que permiten probar diferentes variedades en una misma experiencia.Menú de Meximodo: platos mexicanos tradicionales y cocina modernaLa carta combina clásicos de la comida popular, como tacos de birria y elote asado, con preparaciones más elaboradas, como pollo con mole, enchiladas de hongos y coliflor al pastor. La propuesta busca posicionarse como una cocina mexicana moderna, con platos tradicionales reinterpretados.Historia de Meximodo: de una idea familiar a referente de la cocina mexicana en Nueva JerseyLa historia de Meximodo nació de un pedido entrañable: las hijas de Saurabh Abrol, un reconocido empresario gastronómico en Nueva Jersey, le pidieron que creara un restaurante donde ellas también pudieran disfrutar. Ese gesto familiar se convirtió en la chispa que dio inicio al proyecto. Con la experiencia acumulada en locales de alto nivel como Le Malt Lounge en Colonia y Le Malt Royale en Red Bank, Abrol decidió apostar por un concepto distinto: un espacio divertido, luminoso y familiar que al mismo tiempo ofreciera autenticidad en cada plato y bebida.Para lograrlo, el equipo viajó a México en 2023 en busca de inspiración. En el mercado de Coyoacán, el chef ejecutivo Antonio Carballo exploró especias, chiles e ingredientes que más tarde transformarían la carta en una experiencia gastronómica genuina.Mientras tanto, el maestro mixólogo Carlos Ruiz recorrió campos de agave y destilerías en Tequila, México, con el objetivo de crear una propuesta de coctelería de primer nivel y reunir la mayor selección de tequilas del mundo.De regreso en Nueva Jersey, el sueño se concretó en noviembre de 2023 con la apertura del primer Meximodo en Metuchen. La inauguración reunió a un equipo diverso de talentos: desde la cocina y la mixología hasta el diseño de interiores y la operación diaria, explican en su sitio web.
El empresario Álvaro Clavijo denunció la escasa valoración por la comida tradicional local y la negativa de las nuevas generaciones a formarse en el oficio con estudios sobre la gastronomía colombiana
Cerca de la calle Corrientes, de los teatros, las librerías y los cafés (históricos y, ahora, cafeterías de especialidad), hay una esquina que resulta familiar para cualquiera que haya frecuentado el centro porteño en algún momento de su vida. En el cruce de Sarmiento y Montevideo, los ventanales y el colorido de Chiquilín. con sus paredes y sus letreros de neón, no pasan desapercibidos. Fundado en 1927 (aunque bajo otro nombre y otro local, a metros del actual), el restaurante supo acompañar décadas de una Buenos Aires que ya no existe. "Esta zona era de corridas nocturnas, de gente yendo y viniendo a las dos de la mañana", comenta Carlos Ganduglia, propietario de Chiquilín y cabeza de equipo. Un hombre que, aún con 76 años, no llegó a ver ese esplendor. "Yo estoy desde el 2000. Es una historia de casi 100 años; parece poco, pero es un cuarto de siglo y si bien no viví esa época, he visto de todo", dice con una sonrisa.-¿Cómo empezó Chiquilín? -Contar la historia de Chiquilín directamente me supera: la reconstruyo con las historias que se fueron pasando por generaciones, desde los primeros dueños hasta que llegué, o incluso lo que cuentan los clientes. En concreto, el fondo de comercio se fundó por el año 1927. Tenía otro nombre: se llamaba Bachín y estaba acá enfrente, dentro del mercado central que existía donde actualmente está el Paseo La Plaza. -¿Y cómo surgió el nombre actual? -A raíz de una discusión que tuvieron los socios, uno se fue y se llevó el nombre Bachín. Pero cambió de rubro y lo usó para una marca de mamparas de baño. El otro, como no sabía qué nombre ponerle, le puso el nombre Chiquilín. Para ese entonces, Piazzolla y Ferrer ya habían escrito un tango que se llamó "Chiquilín de Bachín", dedicado al Chiquilín que llevaba flores al boliche.-¿Qué sabés del restaurante de aquellos años? -Era parte de una Buenos Aires que nosotros no conocimos. Te parabas en la calle Corrientes a la madrugada y estaba lleno de gente, no se veía ni para dónde iban ni de dónde venían. Algunos memoriosos que están todavía acá me cuentan que el restaurante prácticamente no cerraba: seguía abierto a las cuatro y media, cinco de la mañana, y a las ocho ya abría de nuevo para la limpieza y las cuestiones administrativas. Con el tiempo fue evolucionando, el mercado se cerró, se levantó el Paseo La Plaza, y los antiguos dueños adquirieron este inmueble, que fue la casa definitiva.-¿Vos cuándo llegaste?-Yo llegué en el año 2000. Venía de una actividad totalmente distinta. Soy contador y estaba más vinculado con cuestiones financieras. Quería un cambio de vida y dedicarme a algo bien concreto. De gastronomía no sabía nada, me acerqué con respeto, de a poco, pasando por varios gerentes y ganando posiciones, opinando con mayor fundamento. Entré como socio comprando el 60% y después adquirí el 100% de la sociedad. Una rareza: nunca aprendí a cocinar; sé comer, pero no cocinar.-¿Cuál es tu rol? -Todavía los jueves, viernes y sábados me pongo en la puerta y recibo en el turno de la cena. A los clientes les hablo en inglés, en francés, en italiano. Me pongo en modo políglota [risas]. Desde la puerta, se ve todo: lo que pasa afuera, cómo cambia la ciudad, y lo que pasa adentro, lo que hay que mejorar, lo que sale bien. La gastronomía es de lunes a lunes, pero yo me organizo con planillas y procedimientos mentales, para no convertirme en esclavo. Tengo tres jefes: uno de cocina, uno administrativo y uno operativo. Ellos hablan conmigo, y yo con ellos. Cada uno se ocupa, después, de su equipo.-Venís de un mundo diferente y acá te metiste "de grande". ¿Qué aprendiste de la gastronomía?-Lo mío es bien racional: aprendí que en la gastronomía es todo un costo fijo. Y hay que saber ponerle valor a lo que ofrecemos. La materia prima, por ejemplo, representa entre el 30 y el 35% del costo de los platos y hay muchísimo trabajo detrás.-¿Cuáles fueron los grandes desafíos?-Siempre hay que surfear la ola, pero sin dudas lo más difícil fue la pandemia, como lo debe haber sido para tantos boliches del rubro. Fue complicado, bajamos de 10.000 cubiertos mensuales a 250. Soportamos la situación porque tuvimos ganas y pusimos esfuerzo; el local es propio, lo que nos dio libertad. Hice de todo, incluso delivery. Cuando pasó y vimos que sobrevivimos, con la gente volviendo desesperada a las salidas, volvimos a reinventarnos y decidimos apuntar a otro público renovando la propuesta. Se fueron el mantel de papel y las servilletas descartables, anulamos los horarios extravagantes y mejoramos la cocina. Subimos los precios, pero también el nivel. Incorporamos pastas con pasteros que fuimos a buscar a los lugares que más nos gustaban. Hoy Chiquilín es un restaurante de carne y pasta y estamos dedicados a un sector de ingresos medios y altos, con bastante turismo.-¿El turismo cambió?-Sí, desapareció un turismo de oportunidad, pero vino otro tipo de turista, por ejemplo paulista, que antes no venía. La Argentina tiene ventajas y estamos bien ubicados: de Buenos Aires salen barcos a la Antártida. Todos los años se difunden cruceros y desde septiembre vienen turistas que por el tipo de viaje que hacen no te van a discutir precios; quieren un buen servicio y una buena recepción.-Tenés muy analizado tu negocio, pero hay un factor humano también en este rubro. ¿Cuál es el vínculo con los empleados y con el público? -Los equipos de trabajo son muy importantes. En tantos años tenemos muchas anécdotas con empleados: he tenido desde un cocinero que se quebró jugando al fútbol hasta un empleado que se enamoró perdidamente de una austríaca y quizás ahora se vaya para allá. Y respecto a la clientela, fue mutando. Antes el almuerzo era muy fuerte, entre los abogados de Tribunales y los oficinistas. El home office cambió ese paisaje. Hoy la noche es nuestro momento más potente, con turistas y un público muy reconocible que es el del teatro, y que viene por turnos de acuerdo a los horarios de la función. -Y deben estar los habituésâ?¦ -¡Claro! Hay un hombre con el que entablé relación en la época del delivery. Él venía todas las semanas y durante el confinamiento comenzó a pedirse carne, como para no perder la costumbre. Charlando en una de esas entregas que hacía yo mismo sacamos la cuenta y resulta que empezó a venir ¡en 1948!. Otra historia linda es la de Nelly Omar -legendaria cantante de tangos- que venía los jueves y se sentaba a la mesa conmigo. Muy graciosa: competía con una bailarina muy conocida a la que no voy a nombrar, porque soy un caballero, a ver cuál de las dos venía más. "Es que siempre me envidió", decía Nelly. -¿Qué tiene que comer sí o sí alguien que los visita hoy? -Depende de la temporada. Acabamos de incorporar el bife Tomahawk, un excelente pedazo de carne, que no falla. Igual que el clásico bife de chorizo o el ojo de bife. Todos son cortes especiales certificados Aberdeen Angus.Las pastas caseras, que llegaron hace una década más o menos, ocupan su lugar, especialmente por su relación precio-calidad: son rellenas, secas, con distintas salsas. Y siempre recomendamos el buen vino argentino. Trabajamos con bodegas tradicionales del país.-El tipo de comida, el tamaño abundante de los platos y la atmósfera, todo remite al bodegón. ¿Se definen así?-Sí, yo exploto esa categoría. A veces la confusión, para el comensal, es la asociación del bodegón con los precios más populares. Y acá se encuentra con otra cosa. Pero yo no quiero negar esa identidad. Esto es tango, Buenos Aires, conversación. Tiene ese toque español también del bodegón porteño, bien cargado: los cuadros de celebridades, las banderas, los jamones colgados, los faldones en el uniforme del servicio. El desafío es mostrar la calidad en lo que hacemos y revalorizarlo.-¿Cuál es la clave para sostenerse casi 100 años? -Se trabaja mucho en la constancia, en el respeto a la cocina y al servicio, en mantener un equipo sólido y adaptarse a los cambios, sin perder la identidad. Creo que, en este caso, mi formación también fue y es de mucha utilidad. Yo entré para sanear las cuentas, así eso dejaba de ser un problema. Lo pienso como un negocio: pago al contado, pero pido un descuento. No hay que subestimar la coyuntura si se quiere seguir adelante.-¿Y qué más hay adelante?-Si tuviera que pensar en algo nuevo, pensaría en una propuesta minimalista. Pero eso ya no sería Chiquilín, sería otro proyecto y yo, aunque estoy súper activo, también estoy grande. Trabajo pensando en que alguien se haga cargo y lo sostenga como hicimos todos estos años. Somos parte de Buenos Aires y nos pudimos adaptar a todos los cambios. Confío en que eso siga así.
El menor iba acompañado de una mujer adulta que esperaba a que él cometiera el acto para después salir tras él
El WhatsApp para reservas tiene como última conexión el domingo a las 3.19 pm. En la app Woki ya no se puede pedir una mesa. Aunque sus redes siguen abiertas, su cierre permanente figura en Google Maps. El último servicio de Sucre, el restaurante que fundó Fernando Trocca y que llegó a ser recomendado Michelin, fue el último domingo, después de un cuarto de siglo de una cocina de temporada con guiños internacionales en un styling urbano y cosmopolita. Hablar de Sucre es hablar de un clásico moderno, que desde 2001 se instaló cómodamente a metros de Figueroa Alcorta, plantando bandera en esa zona de parques y bosques. Quienes tengan presente su puesta en escena, con una llamativa cocina a la vista, la gran barra y la delicadísima cava de cristal que dominaba el salón, entenderán por qué vale la pena el remate que Codero convocó para el martes 9 de septiembre a las 15 horas. La cita es virtual, se llevará a cabo por streaming con martillero público, sin base al mejor postor. El catálogo completo (sillas y taburetes de cuero, mesas de madera, sillones capitoné, heladeras de mostrador en acero inoxidable, línea de fuegos, spiedo al carbón, ingeniería gastronómica, estanterías, mesadas, bachas, cortadora, embutidora, lavavajillas, cerramientos con toldo) y la inscripción se realiza en la web Remates Gastronómicos, donde también se informa que se podrán adquirir las excelentes instalaciones del famoso restaurante, bar & grill que llegó a Latin America's 50 Best Restaurants en tres oportunidades: 2017, 2018 y 2022. Una oportunidad para quien se quiera quedar con un poco de la magia, de su interior industrial. View this post on Instagram A post shared by Cordero Remates (@corderoremates)"Sí, Sucre acaba de cerrar, el domingo, tras 25 años", dijo Fernando Trocca a LA NACION. Y en seguida aclaró: "Pero no voy a hablar ahora, porque estuve por fuera de Sucre Buenos Aires desde hacía tiempo".Su concepto gastronómico supo llegar a Europa y Oriente Medio, donde sigue vigente con los dos locales que la marca tiene en el exterior: en Londres y en Dubai. "Siguen abiertos", confirmó Fernando. Así mismo, Tomás Antelo, quien según Trocca estuvo a cargo de Sucre en los últimos 10 años, también prefiere no dar demasiados detalles aún. "Es un momento difícil, lo mejor me parece hablar más adelante, cuando todo esté más digerido. Es como un duelo".En efecto, se trata de una pérdida de muchas cosas, pero sobre todo, es el fin de un proyecto muy querido, por sus gestores y sus habitués.