Llega el festival masivo que homenajea los platos típicos argentinos, en el que 34 bodegones seleccionados de la ciudad y Gran Buenos Aires ofrecen un plato de pastas para dos personas a precio promocional.
Bajo los árboles del Parque Thays, en plena Recoleta, este fin de semana se celebra la tercera a edición de "Sabor a Buenos Aires", la feria de comida que reúne más de 40 propuestas que van desde los clásicos bodegones y las pizzerías artesanales hasta innovaciones de cocina fusión y pastelería sin TACC. Y lo mejor de todo es que habrá platos con precios en promoción que arrancan en $2500 para cafés y dulces, y desde $7000 para los platos de los restaurantes.El encuentro se completa con shows en vivo y sesiones de DJs que ambientan el paseo, invitando a brindar por papá en mesas comunitarias mientras se disfruta de la mejor oferta gastronómica porteña.Fecha, lugar y entrada para Sabor a Buenos AiresCuándo: sábado 14 de junio de 11 a 20 y domingo 15 de junio de 10 a 19.30.Dónde: Parque Thays (Av. del Libertador y Ayacucho, Recoleta)Entrada: libre y sin costo.Todos los puestos del Sabor a Buenos AiresPanadería y caféÖSS kafféBúlgaro caféCobre CafePuerto BlestNÓMADAClout CafeCura té almaEl Gato NegroJimena FusterVoltaKeik (pastelería vegana)JakartaSasha PastelesMerciCocelia (sin TACC)Two ChurrosCasa TsujiCroque MadameKAKAWABodegonesLas NonasLos BohemiosLa Casona de BelgranoBeba CocinaOggi Pasta e BirraMadrí TapasSan GennaroJuana La SabrosaPizzas, empanadas y hamburguesasPizza ParadisoAmazzaAndiamo PizzaWhat the BurgerArredondoLa Bomba (empanadas tucumanas)ValentiComida gourmetKoi DumplingDumpling PongAmayta x Luigi Di NapoliAguaBarra ChalacaParrillasAsado CamperoGran ParaísoLa CabreraTres FuegosLo de GaunaPromociones especiales y música en vivoEn esta edición de la feria gastronómica habrá precios especiales Cafés y pastelería: desde $2500.Bodegones, pizzerías y parrillas: desde $7000. ¿Cómo llegar al Parque Thays?Colectivos: varias líneas circulan por Avenida del Libertador y Figueroa Alcorta como 17, 61, 67, 92, 93, 110, 124 y 130Subte: la estación Facultad de Derecho (Línea H) queda a pocas cuadras; ideal para combinar el viaje con una caminata por RecoletaTaxis y apps de movilidad: abundan por la zona; suelen tener buena disponibilidad tanto en horario diurno como nocturnoAuto particular: posibilidad de estacionar en las inmediaciones; conviene revisar las restricciones de tránsito vigentes para evitar contratiemposBicicleta: bicisendas cercanas e infraestructura de EcoBici; recomendadas para quienes disfrutan de un recorrido al aire libre por la zona de museos y parques
Porque en cada plato de pastas late el latido de Buenos Aires, del 24 y el 26 de junio, 35 bodegones de la ciudad y el conurbano ofrecen un plato de pastas para dos personas a solo $13.000, en una propuesta que rinde homenaje a la tradición culinaria porteña.Entre cucharas de salsa y risas compartidas, Bodegonmanía reaviva el puente entre comida y memoria. Volver a sentarse en un viejo bodegón porteño equivale a recorrer historias familiares y callejeras al compás de sabores inconfundibles. Elegidos por la influencer Rocío Strat (@lachicadelbrunch), estos restaurante de barrio recuperan el espíritu de las mesas compartidas y ponen en valor recetas tradicionales y salsa rosa, raviolones, ñoquis y fetuccini de impronta clásica.¿Cuándo y dónde es Bodegonmanía?¿Dónde?: en 35 bodegones de Buenos Aires y del Gran Buenos Aires, desde el histórico San Telmo hasta Ramos Mejía, pasando por Palermo, Boedo y La Plata.¿Cuándo?: martes 24, miércoles 25 y jueves 26 de junio. Cada bodegón abrirá en su horario habitual.¿Cómo funciona Bodegonmanía?Para participar, los comensales deben adquirir sus entradas anticipadas -que incluyen el plato para dos- a precio promocional en Passline. Cada ticket trae un código QR que se presentará en el local elegido, con día y turno preseleccionados. Comer, compartir, descubrir: el gesto de reunir a dos personas en torno a un buen plato de pastas vuelve a ser protagonista.Los 35 bodegones participantesTodos los restaurantes fueron seleccionados para celebrar la pasión porteña por las pastas y la camaradería en la mesa. 8 Esquinas Bar (Av. Forest 1186, Chacarita)Barcelona Asturias (Av. Córdoba 5899, Palermo)Bodegón 606 (Necochea 140, Ramos Mejía)Bodegón Como vos quieras (Valentín Gómez 601, Haedo)Bodegón El Globo (Av. Hipólito Yrigoyen 1199, Monserrat)Bodegón El Globito (Av. Caseros 3159, Parque Patricios)Chicha Bodegón (Leandro N. Alem 317, Ramos Mejía)Club Buchardo (Av. Comodoro Martín Rivadavia 1250, Núñez)Club El Progreso (Sarmiento 1334, Balvanera)Don Juan Bar (Camarones 2702, Villa Santa Rita)El Garage Cantina (Marcos Sastre 3160, Villa del Parque)El Halcón (Av. Rivadavia 8451, Floresta)El Inmigrante (Humberto Primo 420, San Telmo)Il Vero Arturito Abasto (San Luis 2999, Abasto)Il Vero Arturito Palermo (Bonpland 1712, Palermo)Jugador Nro 12 Bodegón Argentino (Av. Alicia Moreau de Justo 1738, Puerto Madero)La Caldera (Boyacá 470, Sede Capital Independiente)La Cocina de Bristol (La Rioja 1869, Parque Patricios)La Esquina bodegón (Esquina 2 y 63, La Plata)La Flor de Barracas (Suárez 2095, Barracas)La Fragua Restobar (Av. Rivadavia 4127, Almagro)La Pipeta (San Martín 498, Microcentro)La Rueda (Alsina 158, Avellaneda)La Segunda (Pedro Lozano 3700, Villa del Parque)Los de Lucas (Av. 25 de Mayo 997, Escobar, zona norte)Los Bohemios (Humboldt 540, Villa Crespo)Manolo (Bolívar 1299, San Telmo)Nosso Restaurante (Candelaria 290, Floresta)Puesto 54 (Chacabuco 178, Banfield)Quequén bodegón (Vélez Sársfield 271, Avellaneda)Restaurant ABC (Lavalle 545, Centro)Sandoval (José Bonifacio 1595, Caballito)Sicilia Trattoria (Av. Maipú 2198, Olivos)Turf Parrilla (Inclán 3802, Boedo)Yiyo el Zeneize (Av. Eva Perón 4402, Parque Avellaneda)
La celiaquía le pone límites en materia gastronómica a quienes la padecen, sobre todo cuando deciden salir a comer afuera. Los Antigourmet y Cunnington lanzan una guía real para comer sin gluten, sin miedo y sin resignación. Leer más
Lenny Lennon llegó por primera vez a Buenos Aires en 2002, durante un viaje como mochilero. Pensaba quedarse una semana antes de seguir rumbo a Chile y Perú, pero la semana se estiró a tres meses, tiempo suficiente para comprobar que se había enamorado de la Argentina. Regresó a Londres, donde había vivido desde los dos hasta los dieciocho años, y trabajó en distintos lugares para juntar dinero con una idea bastante clara: instalarse en Buenos Aires. No solo volvió, sino que consiguió un puesto en la cocina de un restaurante, aprendió español casi a la perfección y armó una red de amigos con los que más tarde abrió un bar (Puerta Roja) y un pequeño local de comida al paso (Banco Rojo) que fueron un éxito. Aunque nació en Nueva Zelanda â??y quizá allá las personas tengan otra clase de ambicionesâ?? fue acá donde finalmente alcanzó el "sueño del pibe": tener un restaurante propio en San Telmo, su lugar en el mundo.Desafiando a la parrilla y el bodegónGrapín abrió en octubre de 2024, y más que una novedad gastronómica, es una declaración de principios: se puede comer sin carne y llevar la cocina vegetariana a otro nivel, además de apostar al futuro en el barrio más viejo de la ciudad. Desafiando un entorno turístico dominado por la parrilla y el bodegón, no solo ofrece una carta elaborada y de estación basada solo en vegetales, sino que el proyecto puso en valor una casona de 1907 ubicada en pleno Casco Histórico, sobre calle Bolívar, restaurada por un equipo de expertos en patrimonio. Después de décadas de deterioro e intervenciones erráticas que estropearon parte de la construcción original, la propiedad volvió a brillar para asombro de los vecinos, que tantas veces pasaron por la vereda sin imaginar sus interiores"Grapín surge un día que pasé de casualidad mientras colgaban el cartel de venta. Llamé antes de que terminaran de colgarlo. La fui a ver enseguida. Apenas entré a la casa sentí que tenía una energía muy especial. Estaba bastante abandonada, llena de plantas salvajes, el patio estaba muy verde y en ese momento pude verlo en mi cabeza" recuerda Lenny. El primer intento de compra se frustró por tema de papeleo, pero se quedó con las ganas. La casa está cerca de la suya y el espacio parecía ideal para un nuevo emprendimiento, pese a que la pandemia había dejado medio desierta la zona. Un año después, el cartel apareció colgado de nuevo. "De vuelta llamé y esa vez salió. Tuve que convencer a mi familia para que me prestaran el dinero, porque la casa era mucho más grande de lo que estaba buscando. No encontramos información sobre su historia. En un momento fue sede del club formado por un grupo de trabajadores del Ministerio de Agricultura, acá en Paseo Colón. También pasó por ahí Hugo, de la Brigada, con un restaurante de pastas y mariscos. A lo largo del tiempo supe que la mayoría de mis amigos de San Telmo tiene alguna historia en el lugar porque también fue salón de eventos familiares" recuerda.La casa: un tesoro de 1907Lo que quizá fue un romántico zaguán nos devuelve del caos de la calle al remanso apenas iluminado de un salón de techos altos, en bovedilla, y un patio principal cerrado por una magnífica claraboya que ya estaba ahí. Una barra en mármol de carrara y forma de herradura enmarcada por una obra del artista Martín Kazanietz, recibe y ordena el espacio donde destacan muros de ladrillo a la vista, ladrillos gruesos, los de verdad. El edificio forma parte del Área de Protección Histórica 1 (APH 1) y cuenta con un grado de protección "Cautelar", lo que obliga -entre otros elementos- a conservar el frente.Según la inscripción que reza en la fachada, Turone y Sozzani fueron los constructores de la casa, pero eso es todo lo que se sabe de su pasado más remoto. La puesta en valor tomó más de dos años, cuenta Lenny, atravesados por una fuerte devaluación. Pero ese impasse forzoso le permitió descubrir la nobleza de la arquitectura y entender que la propiedad merecía una intervención mayor. Para eso convocó al estudio de Marcelo Magadán, máster en restauración de monumentos, que tuvo a cargo la restauración de la fachada y de los componentes originales que se preservaban en el interior, incluyendo las carpinterías de madera y la herrería, los mármoles, el revestimiento, las molduras de yeso del hall de acceso y los muros de ladrillo."Por los materiales y sistemas utilizados estimamos que data del último cuarto del siglo XIX. El estilo es 'italianizante', típico de aquella época, y del que todavía pueden encontrarse ejemplos en San Telmo y otros barrios de la ciudad, aunque cada vez menos, dada las persistentes demoliciones a las que se encuentra sometida â??desde hace añosâ?? la arquitectura patrimonial de Buenos Aires. Es probable que en su origen haya sido una vivienda familiar que se fue transformando con el paso del tiempo" explica el arquitecto, autor de grandes proyectos en la ciudad como el Mercado de los Carruajes y las Galerías Pacífico. "Yo prefiero hablar de rehabilitación, ya que se hizo una recuperación respetuosa de lo que quedaba, a la par de una serie de adaptaciones para darle un nuevo uso, incluyendo la incorporación de la cocina y los sanitarios. Cuando nos sumamos al proyecto el primer patio estaba techado -esto al menos desde que había funcionado allí el primer restaurante-, los muros interiores tenían las bovedillas, los ladrillos de la mampostería y la estructura a la vista. Estamos hablando de un espacio que es esencial en tanto articula el funcionamiento del restaurante, más allá de tener un particular atractivo dado por la configuración de la barra de mármol y madera que -siendo un elemento contemporáneo- dialoga muy bien con los materiales históricos de la casona" agrega.La casa ahora tiene una cava, un living privado y un patio pensado desde la sostenibilidad ambiental por el paisajista Fabio Márquez, que implementó un jardín de flora nativa -una gran Dama de Noche- que atrae mariposas y viste de verde el ambiente.Sin proponérselo, Grapín - bautizado así en homenaje a los buenos vinos que incluyen en la carta - quedó en una ubicación ahora inmejorable. Está junto al Mercado de San Telmo, en una micro área donde en los últimos dos años surgieron bares y comercios en edificios icónicos como la Casa de las Cariátides, también restaurada y pronta a convertir su planta alta en restaurante. "Muy pocos vecinos conocían por dentro la casa, así que fue una gran sorpresa. Cuando atravesás esa puerta pensás: ¿cómo puede ser que este lugar siempre estuvo acá y no lo mirábamos?" dice Lenny.Vegetarianos bienvenidosVinos naturales, buenos tragos y la cocina de Verónica Gorgal convencen hasta al carnívoro más recalcitrante: agnolottis de zanahoria emulsionados con manteca cítrica y avellanas, tremenda lasaña de hongos, tablas de quesos, vegetales con alioli de kimchi entre opciones gluten free destacan en una carta que se organiza en platitos y platos. Hacen catas en la terraza (hay 85 etiquetas de bodegas poco convencionales), hay noches con Dj, y para rescatar vale un gesto que define el espíritu del anfitrión: además de agua con y sin gas gratuita y sin límite para los comensales, los vecinos de San Telmo son especialmente bienvenidos, un detalle que da cuenta de una verdadera conexión con la comunidad que lo recibió.
En el entramado urbano de Buenos Aires, Villa Crespo dejó de ser un barrio de perfil bajo para consolidarse como una de las zonas más vibrantes y buscadas por quienes quieren recorrer la ciudad más allá de los circuitos tradicionales. La llegada del Bus Turístico de la Ciudad y la irrupción de espacios como Mercat Villa Crespo o el Movistar Arena terminaron de posicionar a este rincón de historia y bohemia como un destino obligado dentro del mapa porteño.Ubicado a pocas cuadras de Palermo, pero con una identidad propia forjada durante casi 137 años, Villa Crespo combina sus raíces de barrio tradicional con una oferta gastronómica y cultural que no para de crecer. La incorporación de una nueva parada del Bus Turístico â??la número 22, sobre la calle Thames al 700â?? conectó formalmente al barrio con el recorrido de los visitantes que mes a mes eligen esta modalidad para descubrir Buenos Aires.Lejos de ser solo un punto de paso, el ingreso de Villa Crespo al circuito turístico porteño propone mucho más que un recorrido visual: invita a sumergirse en la vida cotidiana de un barrio que conserva su identidad mientras se renueva a través de nuevas propuestas gastronómicas, artísticas y culturales.En el corazón de este nuevo Villa Crespo se encuentra uno de sus protagonistas indiscutidos: el Mercat Villa Crespo. Inaugurado hace cuatro años en Thames 747, este espacio se consolidó como mucho más que un simple mercado gastronómico. Con veinte locales en funcionamiento, el lugar apuesta a un concepto que combina gastronomía, entretenimiento y cultura â??una experiencia conocida como eat-ertainmentâ??, con fuerte presencia de propuestas de vanguardia y una impronta asiática que lo distingue dentro de la ciudad.Uno de sus grandes atractivos es el callejón asiático, un espacio visualmente impactante e ideal para las redes sociales, diseñado hace dos años por Sergio Asato, un reconocido gestor gastronómico y productor cultural.El Mercat también fue sede de eventos culturales de gran convocatoria, como el primer Matsuri â??el festival japonésâ?? organizado en 2025, que reunió a más de 16.000 asistentes y sumó espectáculos de artistas ligados a la cultura asiática.Al caer la tarde, Villa Crespo cambia de ritmo. La calma diurna cede a una escena vibrante, con bares que se llenan, teatros que abren sus puertas y espacios culturales que ofrecen desde música en vivo hasta propuestas independientes. Los murales amarillos y azules, un homenaje a los 120 años del Club Atlanta, le dan al barrio un sello inconfundible, en el que pasado y presente conviven de manera natural.Los mejores shows musicales en el Movistar ArenaOtro de los motores del nuevo impulso turístico fue el Movistar Arena. Desde su inauguración, este estadio techado ubicado en la frontera entre Villa Crespo y Chacarita atrajo a miles de personas con shows de artistas nacionales e internacionales, reforzando la visibilidad del barrio y empujando nuevas inversiones en gastronomía, hotelería y entretenimiento.El auge que vive hoy Villa Crespo no es fruto del azar. Según el Ente de Turismo porteño, el barrio ha registrado un crecimiento sostenido en el flujo de visitantes durante los últimos años, atraídos por una identidad que combina autenticidad, historia y modernidad. Las calles adoquinadas se mezclan con propuestas culturales y comerciales contemporáneas: desde bodegones con décadas de trayectoria hasta nuevas galerías de arte, tiendas de diseño y una creciente movida teatral alternativa.La calle Murillo, célebre por su histórica concentración de locales de cuero, sigue siendo un clásico. También lo es el monumento a Osvaldo Pugliese, emblema del tango y vecino ilustre del barrio. La fuerte presencia de la comunidad judía, los comercios tradicionales, los cafés de siempre y el arte urbano le dan a Villa Crespo un carácter bohemio y singular.Qué hacer en un día en Villa CrespoMañana: café, arte y paseo al solEmpezar con un buen desayuno en Rufus, Zajo o La Bici, tres cafés de especialidad que trabajan con granos seleccionados y pastelería artesanal. Después, caminar hasta la Plaza Gurruchaga y dejarse llevar por el color: ahí nomás están algunos de los murales más llamativos del barrio, como La Flor de Villa Crespo, las obras de Ever Siempre y los murales colectivos de Paste Up curados por Guille Pachelo.Para quienes aman lo retro, vale una visita a la Farmacia Antigua del Águila y a la Peluquería Julio Pan, ambas con fachada intacta desde hace décadas.Mediodía: pizzerías históricas y cocina armeniaEl almuerzo puede ser en clave clásica o exótica. Por un lado, la experiencia indiscutible es sentarse en Pizzería Angelín, inventores pizza canchera, o de cancha, que consiste en que la masa de la pizza es cubierta de salsa de tomate bien especiada, pero sin muzzarella.Para quienes buscan sabores del Cáucaso, el plan es Sarkis o NANI Cocina Armenia, dos de los templos de la comida armenia en Buenos Aires, siempre con mesas llenas y platos abundantes.Después del almuerzo, recorrer los outlets de Aguirre y Murillo, donde conviven locales de primeras marcas con tiendas de cuero clásicas.Tarde: librerías, murales y meriendaA media tarde, una buena idea es visitar Aristipo Libros o sumarse a alguna actividad cultural en Mandrágora Libros y Cultura o Casa Brandon, espacio cultural LGBTIQ+ que funciona en una antigua casa chorizo.Los fans del arte urbano pueden seguir el recorrido por los murales de Hyuro, Jaz, Greenhouse Collective, el mítico mural de Atlanta Popular y la obra de IaraKM, que le pone poesía a las esquinas.La merienda puede ser golosa en Malvón, con sus tortas caseras y ambiente cálido, o más austera y cafetera en DOC Café o Café Crespín.Noche: bodegones, vino y milongaLa noche en Villa Crespo puede arrancar en un bodegón con peso propio: Salgado Alimentos, Cantina A Los Amigos o Totalmente Tano, para los que aman la comida bien hecha sin vueltas.Después, el plan puede seguir con cócteles en Bar 878, vinos por copa en Vico Wine Bar o una birra artesanal en Mefisto Beermarket.¿El cierre perfecto? Milonga o clase de swing en Villa Malcolm, uno de los clubes sociales más icónicos del barrio, o ping pong retro y billar en el legendario Café San Bernardo.El mapa de Villa Crespo
Este fin de semana, 50 de los establecimientos gastronómicos más reconocidos de la Ciudad de Buenos Aires se mudan al aire libre. El sábado 29 y el domingo 30 de marzo, el Parque Thays, en Recoleta, será sede de una nueva edición de Sabor a Buenos Aires, el festival impulsado por el Ministerio de Desarrollo Económico porteño que reúne lo mejor de la cocina local en un solo lugar. Con entrada libre, la propuesta incluye platos, postres e infusiones a precios promocionales, organizados por sectores temáticos para facilitar el recorrido de los asistentes. Como cierre destacado, el sábado se realizará una selección especial: un jurado coordinado elegirá las siete mejores propuestas de toda la feria. Ver esta publicación en Instagram Una publicación compartida por BA Capital GastronoÌ?mica (@bacapitalgastronomica) El evento estará dividido en sectores temáticos para facilitar el recorrido. En el área de cafeterías y pastelerías, se lucirán nombres reconocidos como Maru Botana, Gato Negro, Atelier Fuerza, Joaquín Vasco y Los Galgos (que además recibirá un homenaje especial por sus 95 años de historia)Las pizzerías y casas de empanadas también tendrán su espacio, con locales como Pizza Paradiso y Pizza Zen. En cuanto a las parrillas, estarán presentes clásicos como La Cabrera y Lo de Jesús.La oferta de bodegones incluirá opciones como Yiyo el Zeneize y Bar Roma y, en cuanto a hamburgueserías, estarán presentes The Foodtruck Store y What the Burger. No faltará la cocina internacional, con Koi Dumpling y Aurelia, cantina mexicana, entre las opciones destacadas. Además, Cucina Paradiso Senza Glutine representará a la gastronomía sin TACC, y el mundo del helado estará cubierto por Antiche y Occo, entre otras.Como broche de oro, el sábado se desarrollará una selección especial a cargo de un jurado de expertos que elegirá las siete mejores propuestas de toda la feria.Precios promocionales y una selección curada de localesUno de los principales atractivos del evento es la posibilidad de probar elaboraciones de alto nivel a precios accesibles:Cafés, helados y piezas de pastelería desde $2500.Platos salados en restaurantes y pizzerías desde $7000.Cafeterías y pasteleríasDentro del sector dedicado a los cafés, dulces e infusiones, estarán presentes:Maru BotanaGato NegroAtelier FuerzaLa Ventanita de AnafeJakarta CaféVespressLabánOokiesJoaquín VascoNegro CaféRita CaféBúlgaroNuchaKajuéDon Us CompanyLos Galgos, que recibirá un homenaje especial por sus 95 años de historiaPizzerías y casas de empanadasLas opciones de masas, horno y sabor incluirán:Pizza ParadisoPizza ZenPizzería PopularLuigi Di NapoliParrillasPara los amantes del asado y los sabores tradicionales, participarán:La CabreraLo de JesúsSan GennaroJuan BautistaGran ParaísoLo de GaunaChoriBodegones y restaurantes porteñosLos sabores clásicos de la cocina porteña y popular se harán presentes con:The Foodtruck StoreValentiYiyo el ZeneizeBar RomaCentroClub de la MilanesaOn TapWhat the BurgerBACI (Buenos Aires Cuochi Italiani)Cocina internacional y opciones sin TACCLa diversidad cultural también tendrá su espacio con propuestas internacionales y opciones sin gluten:Koi Dumpling (cocina asiática)Aurelia Cantina MexicanaOhnoCucina Paradiso Senza Glutine (sin TACC)HeladeríasPara los fanáticos de lo dulce y helado, los sabores artesanales estarán representados por:CiroAnticheOccoHulaCon una curaduría cuidada, actividades para disfrutar al aire libre y una fuerte apuesta a la identidad gastronómica local, Sabor a Buenos Aires se perfila como una salida ideal para el fin de semana. Gastronomía, precios accesibles y propuestas para todos los gustos, en un solo lugar.