A través de una medida cautelar, la justicia laboral dispuso restituirle al ex cuñado del líder gastronómico el control de la seccional CABA del gremio. Idas y vueltas de una pelea que lleva casi cuatro años.
El espacio gremial que responde al dirigente gastronómico llevará esa propuesta a la reunión de Consejo Directivo de CGT que se realizará el próximo jueves 20 de marzo. Leer más
El sindicato de maestranza, afín al gastronómico, llevará esa solicitud a la reunión del Consejo Directivo de la central obrera, este jueves.
A los 83 años, Luis Barrionuevo no está dispuesto a ceder su influencia en el ajedrez sindical. Decidido a apoyar a Javier Milei, como lo hizo en las elecciones primarias de 2023, en las que aportó fiscales e hizo campaña, ahora se dispuso a boicotear el paro general al que convocó la CGT para "antes del 10 de abril". El histórico jefe de los gastronómicos convocó para este martes a un grupo de gremios aliados para intentar mostrar que la huelga no goza de unanimidad dentro de la central obrera. "No estoy de acuerdo porque no hubo una reunión formal. Solo lo comunicó el vocero [Héctor] Daer", dijo Barrionuevo a LA NACION para diferenciarse del llamado a la huelga que hizo Daer, uno de los integrantes del triunvirato de mando cegetista junto con el camionero Octavio Argüello y Carlos Acuña, que supo ser el peón del gastronómico en la central obrera. Con esta estrategia, Barrionuevo busca dividir las posturas dentro de la CGT en la previa a la reunión de consejo directivo del jueves próximo, en la que se definirá si el paro general será el 8 o el 10 de abril, y si se hará con movilización o solo con cese de actividades. Después de meses de letargo y de haber sellado una tregua con el gobierno de Milei, la CGT apuró el llamado a una protesta en reclamo de mejoras a los jubilados y en rechazo a la intervención oficial en las negociaciones salariales. Los tiempos se aceleraron por la represión policial del miércoles pasado a los manifestantes que acompañaron la demanda de los jubilados en el Congreso. Barrionuevo convocó para el martes a su tropa en el Sindicato de Maestranza, que lidera Oscar Rojas. Hay tres dirigentes invitados con los que el gastronómico apuesta a debilitar al triunvirato de la CGT. Se trata de Roberto Fernández, jefe de los colectiveros de UTA, un gremio estratégico para garantizar el impacto del paro; el ferroviario Omar Maturano, también determinante, y el mercantil Armando Cavalieri, que con su ausencia a las últimas reuniones de mesa chica ya dio señales que no quiere enfrentarse a Milei. Barrionuevo también cruzó mensaje con el referente de la Uocra, Gerardo Martínez, uno de los interlocutores habituales de la gestión libertaria. Martínez está en una encrucijada: no quiere dinamitar los puentes con el Gobierno, pero tampoco está dispuesto a ir en contra de un paro que ya está lanzado. La decisión de avanzar con el paro, en cambio, tiene apoyo de Daer, referente del sector de "los Gordos"; Hugo Moyano, que participó de la reunión de mesa chica y que en paralelo negocia la paritaria de camioneros; el estatal Andrés Rodríguez, y de los gremios del transporte, salvo los colectiveros de la UTA y de los dos principales gremios ferroviarios. También apoyaron la medida y reaparecieron en la CGT los dirigentes más alienados con el kirchnerismo, como Sergio Palazzo (Bancarios), Abel Furlán (UOM) y Omar Plaini (Canillitas). Ya resolvieron internamente adherirse a la medida cegetista las dos vertientes de la CTA, cuya influencia es fuerte en el sector estatal y entre los gremios docentes provinciales. También está dispuesta a sumarse el Frente de Izquierda, que presiona desde el año pasado a la CGT con avanzar con una medida de fuerza.
Fue en un acto en Mar del Plata, lugar que siempre albergó anuncios políticos del veterano sindicalista. Allí, apuntó tanto contra la ex presidenta Cristina Kirchner, como contra el presidente Javier Milei. Leer más
MAR DEL PLATA.- "Vuelve el peronismo" se lee en los pasacalles que cuelga entre dos columnas de alumbrado público. Las bombas de estruendo hacen temblar los cristales también de los edificios linderos al del céntrico hotel de los trabajadores gastronómicos, donde, con más de medio millar de dirigentes de distintos gremios, el Movimiento Nacional Sindical Peronista (MNSP) se relanza con un nuevo nombre: Trabaj.AR, lo bautizaron. Según trascendió, fue sugerencia de su rama femenina.Las primeras 504 fichas de afiliados las llenaron en las mismas mesas donde se sentaron los participantes del tradicional asado que, desde hace 38 años y nunca con tanta concurrencia, organiza Luis Barrionuevo, titular de la Unión de Trabajadores Hoteleros y Gastronómicos de la República Argentina (Uthgra). Esta vez, en medio de una crisis y divisiones del justicialismo, que Barrionuevo agudiza con su insistencia de tener una fuerza electoral propia. La Libertad Avanza, a quien el gastrónico ayudó en las elecciones primarias de 2023, celebra la atomización peronista."El que no que no quiere estar, que no esté: a los tibios los vomita Dios", afirmó Barrionuevo en esta presentación. Aseguró que no van a entrar en "ningún tipo de internas" y dijo que frente a las derrotas sufridas y la falta de representación queda una única alternativa: "Hay que poner los huevos y trabajar". Y atacó al kirchnerismo: "Se terminaron los mariscales de la derrota, así que fuera el cristinismo, fuera La Cámpora y fuera el albertismo, acá viene esto nuevo". Barrionuevo tiene 82 años.Lo acompañó en esa mesa Carlos Acuña, uno de los integrantes del trinvirato de la Confederación General de Trabajadores (CGT). En esta convocatoria encontró más adhesiones que presencia de caciques del sindicalismo. También algunos apoyos políticos fuertes: enviaron mensajes el gobernador de Salta, Gustavo Sáenz, y el de Catamarca, Raúl Jalil, dos aliados de la Casa Rosada. También envió un emisario el de Córdoba, Martín Llaryora.La responsabilidad de conducir el MNSP recayó en el titular de la Asociación Obrera Textil (AOT), Hugo Benítez. "Hoy para los trabajadores las papas queman", dijo. Tras esta presentación, anticipó un plan de trabajo para recorrer los distritos, afiliando gente.Sandra Barrionuevo, hija del líder gastronómico y coordinadora de Trabaj.AR, se encargó de que todos los asistentes a este asado, servido en el salón del segundo piso del Hotel Presidente Perón de Uthgra, llenaran las tres planillas que implicaban adhesión al flamante partido, inscripción y, por último, la baja a la afiliación a cualquier otra fuerza política de la que fueran parte.Barrionuevo apuró a aclarar que este lanzamiento empieza a dar forma a un brazo político, pero que no tiene candidatos. Dijo que el desafío legislativo que viene servirá como oportunidad para ocupar espacios, desde consejerías escolares a nivel municipal hasta cargos legislativos. Y que recién después verán qué postulante los representa mejor hacia las presidenciales de 2027."No queremos que nos usen más los políticos y tengamos que pagar las consecuencias los trabajadores", advirtió en un reclamo de representación real en los cargos legislativos y ejecutivos. Rememoró los mejores tiempos, con el regreso de la democracia, y el rol de Saúl Ubaldini como protagonista dentro de presencia peronista en la función pública. "Teníamos 25 legisladores", recordó."Se terminaron los mariscales de la derrota, así que fuera el cristinismo, fuera La Cámpora y fuera el albertismo, acá viene esto nuevo"Luis Barrionuevo"Hoy no nos vamos a hacer más cargo de las cagadas que se mandaron todos los políticos que manejaron el país", advirtió, sin hacer nombres ni distinciones partidarias. Dijo que la obligación de la dirigencia gremial es ahora darle el apoyo a los compañeros que desde Trabajar buscarán avanzar en un cambio.Barrionuevo tuvo así su primera exposición pública fuerte luego de los problemas de salud que lo mantuvieron alejados durante varios meses. Se lo vio activo, entusiasmado, menos picante pero con ganas, aunque reconoció que los años pesan que aquel susto que lo llevó a estar internado no se lo olvida fácil: "Ya me salvé y me dijeron 'andá para abajo, seguí haciendo quilombo'", dijo muy sonriente y aplaudido. Se extrañaron sus filosas definiciones sobre figuras y situaciones.En su versión más diplomática generalizó en términos de errores cometidos en gestiones anteriores, sin precisar una u otra. Dio señales de canales abiertos con Axel Kicillof cuando reconoció un diálogo con el jefe de Gabinete bonaerense, Carlos Bianco, referido a la suspensión del acto que el gobernador iba a realizar este sábado en Mar del Plata y suspendido por el crimen de un joven por el que aquí están acusados cinco policías de la fuerza provincial.Elogios a MileiA Milei se refirió más en términos de crítica a propios que al mismísimo Presidente. "Ganó alguien desconocido que no entiende nada de poder", remarcó sobre la última elección y lo relacionó con otros dirigentes en competencia que "no estuvieron a la altura". Pero luego, en diálogo con LA NACION, cuestionó la falta de recuperación económica en términos de consumo, pero pidió darle tiempo ya que le reconoció al mandatario una buena entre sus acciones políticas: "Está haciendo una linda limpieza de los que decían que resolvían los problemas de Argentina", dijo sobre la desaparición de figuras que durante las últimos años habían tenido fuerte incidencia en las decisiones que se tomaban.Esta semana, en una clara sintonía con la administración libertaria, Barrionuevo aceptó revisar su acuerdo salarial para los gastronómicos para bajar los porcentajes, tal como ordenó el ministro de Economía, Luis Caputo. Había pactado un aumento del 16% para cuatro meses y ahora firmó un incremento del 7,% para 6 meses, con porcentajes descendentes que llegan al 0,5% de mejora en mayo.1. La Secretaría de Trabajo va a negar una y mil veces que exista una pauta salarial oficial para las paritarias, pero en el acuerdo de gastronómicos tuvieron que dejar todos los dedos marcados. ¿Cómo funciona este mecanismo? Pasen y vean— Luis Campos (@luiscampos76) February 6, 2025En ese sentido citó el caso del economista Carlos Melconian y 70 técnicos "contra este (en alusión a Milei) que maneja todo". "Apareció el loco y todos afuera", afirmó en términos de elogio y dijo estar cansado de "los que se capacitan en universidades y nos chapean". En conferencia de prensa, remarcó que "hasta ahora la mejor economista es la mujer que ve en su casa hasta dónde le alcanza la plata".
El titular de la Unión de Trabajadores del Turismo, Hoteleros y Gastronómicos (UTHGRA), Luis Barrionuevo, encabezará este viernes su tradicional almuerzo con dirigentes gremiales en el hotel "Presidente Perón", de Mar del Plata. En ese contexto, anunciará de manera oficial el relanzamiento de un armado político propio con el que buscará aumentar la representación sindical en el Congreso. "Vamos a hacer un partido todas las organizaciones gremiales y políticas que se sumen y en 30 días estaremos constituyendo en todo el país el partido nacional del movimiento obrero. Acá no hay excluidos; los que quieren estar, van a estar y los que no, allá ellos", expresó Barrionuevo, en un comunicado. "Estamos planteando un espacio donde el peronismo sindical pueda intervenir en la vida democrática de nuestro movimiento".No se trata de un proyecto nuevo. El 17 de octubre de 2022, Barrionuevo y dirigentes de la Confederación General del Trabajo (CGT) lanzaron el Movimiento Nacional Sindical Peronista (MNSP) que, según indicaron oportunamente, apuntaba a consolidar un "peronismo de trabajadores y trabajadoras" con representación sindical en el ámbito legislativo. Ahora, Barrionuevo busca reflotar ese proyecto para apuntalar la representación legislativa de los gremios. "Tenemos más de 2500 sindicatos en todo el país. Con la estructura que tenemos, si se quiere defender las leyes que hacen a los trabajadores, creo que se tiene que ocupar cargos en el parlamento", afirmó Barrionuevo en diálogo con Radio Mitre, este fin de semana. Actualmente son ocho los sindicalistas que ocupan bancas en la Cámara baja. Ellos son Mario "Paco" Manrique, de SMATA; Carlos Cisneros, de La Bancaria, Jorge "Loma" Ávila, secretario general del Sindicato del Petróleo y Gas Privado de Chubut; Pablo Ansaloni, de la Uatre. A ellos se suman Sergio Palazzo, de La Bancaria, Hugo Yasky y Pablo Carro, ambos de la CTA, y Vanesa Siley, del Sindicatos de Trabajadores Judiciales.Además de funcionar como una plataforma para impulsar nuevos dirigentes gremiales en el Congreso, el armado que propone Barrionuevo pretende ofrecer una alternativa para el peronismo no kirchnerista. En este sentido, el referente del gremio gastronómico se mostró crítico respecto de la conducción partidaria de la expresidenta Cristina Fernández de Kirchner, a quien calificó como "mariscal de la derrota"."Cristina (Kirchner) y Mauricio (Macri) le vienen haciendo daño a la política argentina en general. Son destructivos. Si no son ellos, no quieren que nadie surja", planteó durante la entrevista radial. "A Cambiemos, Mauricio lo destruyó en mil pedazos. Y lo mismo ocurre con el peronismo donde la señora, después de todo, quiere quedarse. Lo único que quiere es la lapicera para dirigir, no da oportunidad para que el peronismo se renueve", dijo Barrionuevo. Sus cuestionamientos al verticalismo de la exmandataria llegan en medio de las diferencias entre la titular del Partido Justicialista y el gobernador bonaerense, Axel Kicillof, por el calendario electoral en la Provincia y una eventual postulación del mandatario local para los comicios de 2027. "Yo no sé si Kicillof será el mejor candidato, pero es el que hoy ostenta la gobernación de la provincia más importante del país. No lo dejan en paz, fijate que no tienen ni presupuesto. Obstruyen permanentemente", señaló el gastronómico en relación a los sectores que responden a Cristina Kirchner."Hoy los que están y se quieren perpetuar son los mariscales de la derrota", agregó el sindicalista, de 82 años. "Falta una conducción que enamore, falta una conducción que nos pueda llevar a los peronistas al triunfo", señaló.
Con ecos de una figura internacional de los años noventa, la nueva fuerza política del gremialismo peronista será presentada en un acto donde, hasta ahora, hay muchas presencias sindicales que no están aseguradas. El trasfondo de una iniciativa para sumar más bancas